Mónica Plaza ha entrado en el radar deportivo soriano. La aragonesa es conocida en el mundo del motor a nivel nacional por su participación en múltiples pruebas, pero destacando una de las más mediáticas, el Rally Dakar. Acumula ya cuatro participaciones y en esta edición se veía obligada a abandonar después de la primera semana de competición.

Pero, ¿qué tiene que ver todo esto con nuestra provincia? La respuesta llega de la mano del ciclismo. Esta deportista es también una asidua del mundo de la bicicleta y en esta temporada ha fichado por 'Soria Puro Oxígeno', la marca liderada por 'Selu' Gómez. «Coincidí con él en un curso de mountain bike hace cuatro años», recuerda ahora. «Es una bellísima persona y el equipo corre por pura pasión al ciclismo, y cuando cumplen con esos valores te animas a ello», cuenta con humildad.

El equipo soriano suma ahora a una apasionada de este deporte que refuerza la parcela femenina de esta escuadra, que ya se ha visto en algunas de las pruebas más importantes del país y que además le da un importante toque mediático por su brillante trayectoria en el mundo del motor. 

Dos Pasiones. Mónica Plaza es una enamorada del motor. «Me viene de familia, por mi padre y mi tío», cuenta. «Cada fin de semana los vivía sobre ruedas y era inevitable acabar haciendo esto», reconoce la conquense. Con el paso de los años se ha convertido en su profesión, es piloto profesional y su nivel crece cada temporada con tan solo 27 años en su DNI.

Sus momentos de más atención llegan con el Dakar. En su cuarta participación probaba la parte más dura del desierto. «Este año iniciamos un nuevo proyecto, hicimos modificaciones al coche y salió mal, nos dio dificultades durante toda la carrera», lamenta. Su abandono no evita que siga enamorada de la mítica prueba. «Para el año que viene todavía queda mucho, pero volveré, ya veremos cómo porque exige muchos patrocinios», añade.

La temporada ahora la plantea a caballo entre el mundial de Cross Country, que son carreras tipo Dakar de una semana, y la bicicleta. Compaginarlo es complicado. «Me llevo la bicicleta o el rodillo a todos los sitios para poder seguir entrenando», explica. Mónica Plaza cuenta con naturalidad que no puede mejorar en el ciclismo todo lo que querría. «Esto es constancia y hay fines de semana que no puedo tocar la bici», lamenta.

A pesar de tener una agenda completa, no ceja en su empeño de mejorar. «Me siento una privilegiada porque estoy en un equipo muy acogedor y lo voy a dar todo por ayudar a que crezca», avisa la aragonesa. Prueba de ello es su participación en carreras como la Mediterranean Epic o la Vuelta a Ibiza. «Esas competiciones hacen que en semanas en las que puedo entrenar menos pueda ir ganando experiencia sobre la bicicleta», sentencia.

Ahora seguirá mezclando ambas pasiones, pero llevando también el nombre de Soria por todo el país. «Me han adoptado y estoy muy agradecida», manifiesta. Los resultados ya llegarán porque empeño y dedicación son sus señas de identidad.