Loli Escribano

SIN RED

Loli Escribano

Periodista


Lo imprevisible

18/09/2020

Me encantan las sorpresas. Todo lo que hace que la vida tenga chispa y te haga girar como una peonza alocada. Todo lo que te deja con la boca abierta. Todo lo que rompe la rutina y, sobre todo, me fascina lo imprevisible. Justo todo lo contrario a la más absoluta nada agostiza que hemos padecido en esta provincia, con permiso del Covid. Ha sido un mes de agosto tan huero como todos los agostos de antes de la pandemia. ¡Qué aburrimiento! Y hete aquí que ha llegado septiembre y me ha sacado de esa nada agostiza que hemos vivido. De repente, salió el alcalde de Soria anunciando la posibilidad de comprar unos terrenos que salen a subasta. Y, por si fuera poco, también nos sorprendió con la opción de comprar o permutar un palacio. Que suena a peli de Walt Disney. Gracias, gracias, gracias. He leído en algún texto de autoayuda que hay que dar las gracias siempre tres veces. No recuerdo la razón, pero yo lo hago siempre, por si acaso. No le doy al Excelentísimo las gracias triples por la compra de los terrenos ni por la del palacio, le doy las gracias por esa capacidad de salirse de lo previsible y permitir que podamos debatir de algo que no esté relacionado con la pandemia y que podamos aparcar durante un ratillo palabras como mascarilla, protocolo, aislamiento o hidroalcohólico. Mucho se ha analizado el éxito de Carlos Martínez. No voy a hacer ahora apología de su figura ni santificarlo ni pedir que en vez de la maqueta de bronce de la ciudad hagan un busto suyo y lo coloquen en la ermita junto al de San Saturio. No, no, no. También triplico la negación, por si acaso. Pero es evidente que tiene un don para dar unos golpes de efecto inesperados que generan filias, fobias o simplemente, como en mi caso, el agradecimiento por poder salir de esa espiral informativa sin fin en la que se ha convertido el Covid. Si en mayo ya confesé que estaba del coronavirus hasta el toto, imaginen cómo estoy en septiembre
No sé si la operación urbanística de los terrenos de Los Royales Oeste será buena o mala. Tampoco sé si la posible compra del palacio del Marqués de Alcántara será una buena iniciativa. El tiempo lo dirá como el tiempo ha demostrado que el proyecto de la mole del mercado municipal fue un estrepitoso fracaso. Como el tiempo ha demostrado que la peatonalización del centro ha convertido a nuestra Soria en una ciudad un poco más moderna. Se agradece, en este panorama provincial alicaído y mortecino, el talante de las personas con iniciativas y con ideas. De personas que están vivas. Se agradece que en una ciudad trasnochada ideológicamente como lo es la nuestra (a riesgo de que más de uno se enoje y que otros no se identifiquen), se atisbe un poquillo de creatividad en la gestión política. Gracias, gracias, gracias.