He tenido ocasión de usar los servicios de la nueva compañía de trenes ‘low cost’ y alta velocidad, concretamente Ouigo. La verdad es que es un lujo montar en esos trenes, los vagones y el personal de a bordo. Pero lo importante del asunto son los precios. Para hacernos una idea, el trayecto Madrid-Zaragoza tiene un coste de 9 euros, por lo que si lo trasponemos al coste que podría tener un Soria-Madrid sería de unos 4 ó 5 euros. Alucinan, ¿a qué sí? Pues eso es lo que hay. El coste del billete de Soria a Madrid es de 21 euros en una ‘diligencia’  en la que solo falta que salgan los indios a tirarnos flechas por el camino.
Y como parece que poder comprar nuestras infraestructuras a las de cualquier rincón de España va a ser tarea imposible durante mucho tiempo, pues igual hay que pensar en beneficios para los moradores de la España despoblada- Ya lo tienen las familias numerosas y otros colectivos. Creo que estaría justificado una bonificación en el precio de los transportes públicos para los sorianitos, o turolenses. Y lo mismo que con los transportes públicos con las matrículas universitarias de nuestros hijos. Y así lo reconocen nuestros políticos provinciales y locales cuando aprueban convenios colectivos para los trabajadores de las administraciones públicas en los que se conceden importantes ayudas para el estudio en las universidades. Todo eso, que está muy bien, se debería extender a todos los ciudadanos de esta provincia, maltratada por el tiempo, por las políticas desde hace 100 años o más y del mapa de desarrollo de nuestro país. Y es que mantenemos el medio ambiente, limpiamos el aire que manchan las necesarias fábricas de otras provincias, y damos descanso durante los periodos vacacionales. Seguro que si el Presidente viniera en el tren lo entendería. Nos lo merecemos.