Fernando González Ferreras

PREDICANDO EN EL DESIERTO

Fernando González Ferreras

Catedrático


La historia se repite

18/12/2021

Me gustan las series de televisión de temas políticos. La ficción suele ser más pobre que la realidad, pero las series ponen de manifiesto estrategias, engaños y conspiraciones que de otra forma pudieran pasar desapercibidos. Mirar atrás permite entender mejor lo que ocurre hoy. Ha habido series antiguas que me hicieron reflexionar sobre aspectos importantes de la vida política. En los 73 episodios de la serie norteamericana 'House of Cards' se mostraban como un político despechado por no haber alcanzado el puesto que pretendía, trata de lograr mayor poder con una estrategia de manipulación y engaño. Los 30 episodios de la serie 'Borgen' mostraron los entresijos de la política danesa, las relaciones entre la política y los medios de difusión y las malas artes para ganar unas elecciones. Y, por encima, destaco 'Crematorio', la primera serie política española. En sus 8 episodios se retrata la corrupción urbanística (comprar tierras rústicas para esperar la recalificación, lo que hacía repentinos millonarios) a través de la historia de un despiadado empresario que se salta la legalidad con tal de llevar a cabo sus negocios, sobornando o chantajeando a cargos políticos y teniendo cómplices dentro de la policía, actitud muy reconocible actualmente. Es curioso que, a pesar de ser aplaudida por la crítica, no sobrepasó el 5% de cuota de pantalla. Quizá no queramos enfrentarnos con la realidad.
Muy interesante es la serie 'Baron noir' que en 24 episodios expone el lado oscuro de la política francesa, un manual de táctica y estrategia política en la que no faltan el cinismo, la mentira, la corrupción, la deslealtad y la venganza a través de las acciones de un alcalde amoral y su lucha por el poder, recurriendo al populismo como arma ideológica y obsesionado solamente con su éxito personal. Uno de sus guionistas fue, durante muchos años, miembro del partido socialista francés, lo que puede que le haya inspirado. Es muy preocupante que tanto el presidente Sánchez como Pablo Iglesias la hayan seguido, alabado y recomendado. No sé si les habrá servido de ejemplo. Mi serie preferida es 'Vota Juan', un perfecto retrato de la mediocridad de muchos de nuestros políticos, una sátira con humor e ironía. El personaje principal, Juan Carrasco, es un político incompetente lleno de sueños de grandeza. Los 8 episodios de la primera temporada cuentan intrigas y envidias y es un resumen de todo lo que no debe hacer un político; sus defectos, su carácter mezquino y mentiroso y el trato vergonzoso que dispensa a su familia le hacen triunfar y perder. La segunda etapa de 7 episodios, 'Vamos Juan' le presenta trabajando como profesor, pero sin renunciar a su sueño de ser presidente del Gobierno. Con la ayuda de su equipo, formado por su jefa de prensa, su jefa de gabinete y su asesor personal (una excelente interpretación de lo que hacen muchos de los asesores nombrados nadie sabe ni por qué ni para qué) monta un nuevo partido que produce resultados insospechados. En la tercera temporada, 'Venga Juan', este atraviesa un momento extraordinario. Ha adelgazado, se ha puesto pelo y, gracias a las puertas giratorias, está en un estupendo despacho. Todo parece ir bien hasta que se descubren unos documentos que lo involucran en un asunto de corrupción municipal, por lo que efectúa unos esfuerzos desesperados por borrar su pasado y librarse de la cárcel. Una serie imprescindible para entender la actualidad.