César Millán

César Millán


De plataforma a partido político

18/02/2023

Acabo de llegar de Valladolid, cierro los ojos y solo veo camiones. Decenas de camiones que se presentan ante mí sin importar la dirección o la carretera por la que me dirija. No voy a negar que gracias a los camiones, y por lo tanto a los camioneros, nuestro estado de bienestar (o como cada cual quiera definirlo) es el que es, que disponemos a diario de todo lo que necesitamos, incluso de mucho más. Que desde la pieza más pequeña hasta la más grande, pasando por cualquiera que podamos imaginar, vienen hasta nuestras ciudades, hasta nuestras casas, gracias a un camión.
Pero claro, cuando viajamos y somos nosotros los que estamos al volante de un vehículo, los camioneros se convierten en un obstáculo, en un freno al horario y a la velocidad que en nuestra mente teníamos estudiados. Así que lo que más echamos de menos es esa autovía que nos permitiría avanzar con la suficiente presteza para que los camiones se queden en una mera anécdota. Y por supuesto, de Valladolid a Soria, o de Soria a Valladolid, los tramos en los que la carretera es convencional se convierten en un calvario que hace que nos percatemos del elevado número de camiones que nos cruzamos y, sobre todo, de aquellos que van apareciendo delante de nosotros. 
Menos mal que a lo largo de los casi doscientos diez kilómetros que nos separan de Valladolid hay tramos de autovía que nos permiten superar a los vehículos de gran tamaño y parecernos que el viaje no resulta tan pesado. Unos tramos que, aunque escasos -no se nos olvide-, se han conseguido gracias a las reclamaciones de los sorianos a lo largo de mucho tiempo y en especial a la continuada labor de la plataforma ciudadana Soria ¡Ya! De sus continuas reivindicaciones, de sus actos, del logro de concienciarnos a los sorianos del poder que tiene la ciudadanía.
Es cierto que el hecho de convertirse en partido político ha hecho que las cosas se lleven a cabo de distinta manera, que la plataforma, como tal, ya no tenga el mismo sentido y que los escenarios, para bien o para mal, cambien notablemente. Pero también lo es el hecho de que las reivindicaciones se presenten de manera directa, que nadie en nuestra comunidad pueda obviar la situación y las reclamaciones de los sorianos. 
Muchas han sido las voces, en el mundo de la política regional, que me han comunicado la envidiable labor (cuando quienes hablaban eran de las provincias más deprimidas) y la guerra que estaban dando (cuando lo eran de Valladolid, Burgos o Salamanca) nuestros tres procuradores de Soria ¡Ya!  Muchos, sobre todo los primeros, no entendían su rechazo a participar en las elecciones locales, quizá porque nos hemos acostumbrado a ver solo el valor de la victoria sin percatarnos de la importancia del trabajo. Por mi parte me alegro de la decisión tomada y de que Soria ¡Ya! guarde sus energías para reclamar en las capitales de España y de Castilla y León lo que a Soria y sus ciudadanos corresponde. Para el viaje de Soria a Valladolid, y de Valladolid a Soria, se pueda realizar de forma más cómoda y, sobre todo, más segura.