Si hay una frase que se ha repetido, y que lamentablemente se sigue repitiendo, en nuestra ciudad es que «Soria es aburrida y que no pasa nunca nada». Opino que los pueblos y las ciudades no son aburridos, lo son los habitantes que las pueblan y poco o nada hacen para  que la situación varíe. Pero es que además, en el caso de Soria nada es más lejos de la realidad, al menos en el apartado que más conozco que es el cultural, por no hablar del deportivo. Tras un verano lleno de actividades, donde el teatro, la música y los libros han llenado la ciudad -¿cuántas ciudades pueden presumir de tener en apenas dos meses un Soria Rock, el Enclave de Agua,  Soria Clásica, el Festival de Títeres, el Festival de Teatro de Calle y Expoesía? Por no hablar de exposiciones y talleres casi a diario-. Nos encontramos con un otoño en el que la cultura se respira en cada uno de los espacios disponibles.
El Otoño Musical Soriano es el ejemplo más destacado de lo que atesora nuestra ciudad, la calidad de cada una de sus actividades, los visitantes que se van sumando año tras año para disfrutar de los conciertos y demás actividades, de la posibilidad que tenemos los sorianos de encontrar en la puerta de casa la música de mejor calidad. Es de agradecer a aquellos que logran tan amplia variedad y, por encima de todo, la categoría de los participantes. Enorme el esfuerzo de quienes en la sombra se han ocupado y preocupado de que se lleve a cabo, superándose en cada edición.
Y sin apenas tiempo vemos como las Fiestas de San Saturio, a las que siempre hemos asociado al disfrute infantil, se han ido convirtiendo en un amplio abanico de estilos musicales. Aquí deberíamos resaltar el trabajo realizado para lograr llevar a cabo el Create Dance Festival, el esfuerzo de la asociación cultural InnovAction y del coordinador del Festival Víctor Monge. Gracias por ofrecernos una nueva visión del arte.
Por supuesto que no me quiero olvidar de otra actividad que cobra una fuerza especial gracias a la Comparsa Municipal de Gigantes y Cabezudos de Soria y que logra que los niños y niñas, y también quienes dejaron de serlo hace tiempo, disfruten de una tradición que, no podemos olvidar, forma también parte de nuestra cultura.  Enhorabuena a quienes han sabido gestionar la actividad.
Y claro, lo que viene en los meses de octubre y noviembre es también de resaltar, el Festival de las Ánimas y el Certamen Internacional de Cortos Ciudad de Soria. El primero va creciendo a un ritmo trepidante y junto al plato fuerte del desfile y posterior lectura de la Leyenda del Monte de las Ánimas, podemos disfrutar de las Lecturas de Relatos de Terror, la Carrera Ambientada de Ánimas, el Concurso de Relatos de Terror y Fantasía, entre otras actividades. Y el Certamen de Cortos logra traer a Soria lo más representativo del séptimo arte en versión reducida tanto a nivel nacional como internacional. Todo sin olvidar exposiciones, la Programación Cultural de la Audiencia, charlas, Club de Lectura, música, fotografía y presentaciones de libros.