Carlos Lafuente

Carlos Lafuente

Trabajador de la Función Pública


La verdadera libertad

31/01/2020

Cada cierto tiempo son los medios de comunicación los que nos sorprenden por ser ellos mismos la propia noticia, como ha ocurrido recientemente con la periodista del Washington Post Felicia Sonmez, que hizo un tuit ‘negativo’ sobre Kobe Bryant y fue cesada fulminantemente. Nos hace eso pensar en la verdadera libertad que tienen los periodistas para informar sin verse amenazados por cualquier espada de Damocles. Y noticia también está siendo la comisión de investigación en las Cortes sobre la financiación y los planes de medios de la Junta. Y es que siempre he sospechado que manda quien paga. Y la tarta de los contratos de publicidad de la Junta de Castilla y León tiene que ser muy jugosa y apetecible, tanto para los medios que aseguran su financiación como para la Junta que puede convertir estos contratos en un valioso medio para callar noticias y propulsar otras. Cuando ha hecho falta aprobar una Orden del plan de medios y una Ley de Publicidad Institucional nos damos cuenta de la importancia del tema. Hay mucha tela que cortar. Lo mismo ocurre con cualquier Ayuntamiento por pequeño que sea. Andan en este primer mes del año repartiendo contratillos de publicidad para asegurar que se visionen sus fiestas, sus proyectos y ya de paso que se ensalce la figura de su alcalde.
Llegados a este punto me voy a permitir poner un interrogante de duda ante algunos y algunas periodistas que no disimulan su valentía en contar o denunciar actitudes de políticos y algún que otro personaje más o menos público. Pero según se va subiendo en el ranquin de clientes con gorda facturación la misma voz que sonaba gritona ahora se va haciendo ronca hasta desaparecer. ¡Qué sería de nuestra sociedad sin la prensa! La creo necesaria y creo que tenemos en nuestra provincia unos estupendos periodistas, pero creo que no hemos encontrado la forma de asegurar la plena libertad para ser totalmente independiente. El vil metal y sus custodios siguen mandando.