Ignacio Fernández

Ignacio Fernández

Periodista


Moción

04/03/2021

Señores procuradores: como lo suyo es hablar (son parlamentarios), hagámoslo: hablemos. Ya verán: ójala que para cientos de miles de castellano y leoneses, los problemas de ustedes fueran sus problemas. Los suyos residen en ganar contiendas verbales y vencer en el Juego de Tronos del poder. La gente: para muchos, volver al trabajo; si es propio, poder abrir el restaurante o el comercio. Si es dependiente, encontrar uno o sencillamente encontrar el que se perdió. Para otros, renovar el ICO con el banco ahora que va a vencer, llegar a tiempo para pagar los seguros sociales (incluyendo los de los ere). Pagar la nómina.

Pero ustedes parecen empeñarse en crear problemas nuevos para darles soluciones propias, aparecer así como salvadores y reclamar a continuación la gestión de la administración pública. Es un viejo truco del que depende la narrativa de los políticos no ejecutivos, los que se sientan en los escaños. Los que parlotean.

Ahora han puesto a rodar la bola de la moción de censura para diversión de cenáculos, cabildeo de estrategas y deleite de tacticistas. Es lo de siempre: discutir el papel de la tripulación en pleno vuelo, con turbulencias y tormenta en el aeropuerto de destino. Con el pasaje acongojado ahora que parece que el arco iris empieza a perfilarse sobre la línea del horizonte.

Verán, señores procuradores: los PMI (no es marca de leche) apuntaron ayer a una próxima recuperación; la industria empieza a carburar; Bloomberg hizo un informe según el cual España es el segundo país del mundo que mayor porcentaje de ahorro sobre PIB atesoran sus ciudadanos. Los informes de coyuntura cuentan con una fuerte recuperación a partir de mayo: ¿De verdad que hay que estar perdiendo el tiempo hablando de quítate tú pa ponerme yo?¿ Para eso les pagan? ¿Es tiempo de mudanza el tiempo de turbación? 

Seguimos mirando al dedo que señala a las estrellas. Qué coñazo.