Fue en 1977 cuando se celebró por primera vez la subida al pico San Vicente de Muriel Viejo y tres años después la tercera y última edición hasta la fecha. Cuatro décadas después el alcalde Carlos González y su equipo se han empeñado en desempolvar una de las citas atléticas más veteranas de la provincia, y de esta manera, apadrinados por Abel Antón, en torno a 70 corredores tomarán la salida el sábado desde las 11.30 horas. Será la cuarta edición, primera de esta nueva época, que se añade al amplio abanico de carreras pedestres y de montaña que se dan a lo largo del año por toda la provincia. Desde el pueblo hasta el pico hay aproximadamente dos kilómetros con un desnivel de unos 200 metros. Una de las peculiaridades de la prueba es que el recorrido es libre, es decir, cada uno subirá y bajará por el trazado que elija siempre dentro de unos límites. Para próximas ediciones la idea es ampliar el recorrido añadiendo más distancia. La inscripción todavía está abierta. Los premios para los ganadores serán de 250 euros, tanto para categoría femenina como masculina. También hay recompensa en metálico para segundos y terceros.