Alicia Sanz forma parte del reparto de la serie El Cid en el papel de Doña Urraca y es una de las jóvenes promesas de la interpretación, con una amplia trayectoria en cine, teatro y televisión y proyección internacional (se ha trasladado a Los Ángeles y ha participado en la serie Abierto hasta el amanecer, entre otras). En esta entrevista para El Día de Soria, la actriz ceutí ofrece detalles del rodaje en Soria y elogia la relevancia de las mujeres en la Historia y esta serie a punto de estrenarse.

¿Qué le parece el plató de Soria?

Estuvimos varias semanas y me encantó la parte de los castillos  e iglesias y creo que la conservación es increíble y que pueden localizarse allí más rodajes. Nosotros estuvimos muy bien en Soria y me encantaría volver, también por la gastronomía y a comer setas cuando se pueda. 

¿Por qué hay que ver la serie?

Aunque sea histórica, realmente habla de muchos temas que se están viendo ahora en la sociedad en la que estamos, como las ambiciones y las luchas por el poder.Es una serie que para verla es un regalo por las batallas, la acción, como está rodada, los efectos. Creo que los personajes están muy bien escritos y muy bien desarrollados. No se queda solo en la historia de El Cid, sino que abarca también cómo se vivía en la época, qué instrumentos se utilizaban, qué era lo que les interesaba... Es muy buena para aprender sobre la época medieval en lo que era España.

Ver El Cid es una forma de saber quiénes somos realmente. Yo si fuera soriana y viera siempre ese castilllo me haría muchas preguntas sobre nuestros antepasados y su forma de vida. Para la imaginación va a ser algo satisfactorio.

 ¿Se aprende Historia?

Yo hice anteriormente Bandolera y Amar es para siempre [también participó en Cuéntame], no tan lejanas en el tiempo, pero me encanta porque es una forma de poder investigar distintas épocas. A mí me sirve mucho leer y para este personaje leí Urraca, Señora de Zamora, de Amalia Gómez, que me sirvió mucho, y en internet hay muchos datos... 

¿Qué destaca de su personaje?

Es la primogénita de Fernando y Sancha y luchó porque las mujeres tuvieran el mismo derecho que los hombres a gobernar. Era inteligente, fuerte, ambiciosa e incluso estratega y su hermano Alfonso le ayudó mucho. El discurso feminista también existió en la Edad Media, lo que me sorprendió porque nos han hecho pensar en la sumisión. Ya en la Edad Media tenían algo que decir y es muy interesante verlo en pantalla, no solo con mi personaje, también con Sancha. Llevamos tiempo buscando este lugar que estamos encontrando.

¿Y del rodaje y la producción?

He tenido suerte de tener escenas con casi todos los personajes y lo he pasado muy bien con Elia Galera (Sancha). Hay una escena que me gusta mucho con José Luis García Pérez en el trono, sentí realmente el poder masculino y me impactó trabajar con él. 

La labor que ha hecho en escenarios, escenografía, maquillaje, peluquería, vestuario... es brutal y más cuando es una serie de época en la que hay que investigar. Yo tengo una escena de baño y eso ha llevado a preguntarse cómo lo hacían, qué prendas usaban y cómo era una habitación. Hay mucho trabajo detrás de una serie histórica.