Compartir la fe desde Soria en tiempos de covid

A.I.P.
-

Un total de 89 misioneros sorianos (51 varones y 38 mujeres) están repartidos en África, América, Asia y Europa

Compartir la fe en tiempos de covid

Todos los cristianos, por su bautismo, están llamados a ser misioneros en cualquier ámbito de la vida. Algunos optan por salir a la misión ‘ad gentes’, fuera de sus fronteras, tal y como recuerdan desde la Diócesis de Osma-Soria. España es uno de los países que más misioneros tiene, unos 7.700 repartidos por el mundo, en 135 países, y más de 3.100 en el territorio nacional, colaborando con la animación misionera o a la espera de nuevos destinos. Y, actualmente, un total de 89 misioneros sorianos (51 varones y 38 mujeres) están repartidos en África, Asia, América y Europa.

El delegado para las Misiones de la Diócesis de Osma-Soria, Alberto Cisneros, explica que el rostro de los misioneros es «muy variado», por los carismas de sus congregaciones o los cometidos que tienen asignados. «Muchos son los que están dedicados a la educación, la salud -dispensarios, residencias de ancianos...-, la promoción de la mujer, etcétera, sin olvidar nunca que su primera misión es compartir la fe», apostilla.

Unas 387 instituciones españolas envían misioneros a distintos territorios del planeta donde la labor de la Iglesia se topa con dificultades para seguir adelante por la falta de medios personales y económicos. Además, la pandemia ha contribuido a empeorar la situación. Aunque no ha afectado a los destinos de los misioneros, que «han seguido sirviendo allá donde están» independientemente de las condiciones de la crisis sanitaria de la COVID-19, el coronavirus «ha puesto en jaque» algunas tareas. «Son situaciones que ahora tienen que afrontar sin los medios necesarios, donde es difícil conseguir mascarillas, mantener la distancia social o las vacunas. La COVID ha venido a sumarse a otras pandemias que ya existían como el hambre, la malaria, el cólera, la falta de escuelas o la posibilidad de educación... y un sin fin de ‘covidades’ con las que tienen que luchar día a día con su gente. Para muchos, la COVID es una más entre tantas», advierte Alberto Cisneros.

El delegado de Misiones de Osma-Soria menciona el trabajo que está desarrollando monseñor Jesús Ruiz Molina, misionero mirandés nombrado en marzo obispo de Mbaïki, en República Centroafricana, donde ha puesto en marcha el proyecto Escuelas para la Paz, en las que se escolariza a cientos de niños que llevaban años sin poder asistir a clase por los conflictos armados entre guerrillas.

solidaridad. La última campaña del Domund (18 de octubre de 2020), lanzada con el lema ‘Aquí estoy, envíame’, consiguió una recaudación en Soria de 41.467,12 euros, lo que supuso «un incremento en las ayudas» respecto al año anterior, ya que, según Alberto Cisneros, la ciudadanía estaba «más sensibilizada» frente a las condiciones de los habitantes de otros continentes para afrontar esta crisis sanitaria. «Nuestros misioneros dan mucha confianza a sus paisanos y saben que están dando la vida, especialmente en situación de pandemia», matiza. En 2019, la suma de la  Diócesis de Osma-Soria para la Propagación de la Fe de las Obras Misionales Pontificias fue de 36.983 euros.

En cuanto a las expectativas de cara a este 2021, Cisneros confía en que «sigan por el mismo camino» y continúe la tendencia al incremento de las aportaciones económicas. «Hasta que no llegue el Domund, no lo sabremos. Aunque el gran reto siempre es la concienciación misionera. Si una persona se sensibiliza con la realidad de los más pobres, estará siempre dispuesto a colaborar económicamente», argumenta.

El sostenimiento de los Territorios de Misión (1.115) es posible gracias a la colecta del Domund (Domingo Mundial de las Misiones). Todos los países, incluidos los que reciben dinero, hacen sus aportaciones y con lo recaudado se nutre el Fondo Universal de Solidaridad, que se pone a disposición de la Santa Sede. España es, después de Estados Unidos, el segundo país del mundo que más colabora con el Domund. Juntos aportan más de la mitad del fondo, que recibió 77,77 millones de euros en 2020 procedentes de la recaudación del año anterior.

Cabe recordar algunos datos, como el hecho de que un sacerdote en un Territorio de Misión atiende a más del doble de habitantes que otro de la Iglesia universal o que más de la mitad de las escuelas católicas están en las misiones (119.200). Además, el 26% del trabajo social de la Iglesia se desarrolla en estos destinos, donde están desplegadas cerca de 27.000 instituciones sociales (hospitales, orfanatos, residencias de mayores, etcétera).

evolución. En 2019, año en el que   octubre fue declarado por el Papa Francisco como Mes Misionero Extraordinario para conmemorar el centenario de la Encíclica Maximun Illid de Pablo VI, la Diócesis de Osma-Soria contaba con 105 misioneros repartidos en distintos emplazamientos, mientras que el número bajó a 96 en 2020 y este año son 89.

Soria ha dado muchos misioneros a lo largo de la historia. San Pedro de Osma renovó material y espiritualmente a la Diócesis, mientras que santo Domingo de Guzmán fundó la Orden de Predicadores. Además, san Francisco Javier fue declarado patrono de las misiones de la Iglesia católica y destaca, asimismo, Fray Tomás de Berlanga por su compromiso en la defensa de los indígenas. La venerable sor María Jesús de Ágreda, sin salir del claustro, evangelizó en Nuevo México, y la labor del beato Palafox fue ingente como obispo de Puebla. Además, Carmen Hernández proclamó el Kerigma por todo el mundo y el beato Ciriaco María Sancha y Hervás se entregó a los pobres en Santiago de Cuba.