Los jugadores del Numancia viven confinados y preocupados, como todo el mundo, la situación generada con la crisis del coronavirus. Físicamente tratan de mantenerse con las directrices que les mandan los preparadores, pero reconocen que no es lo mismo y la forma se pierde rápidamente. En cuanto a su situación profesional, con los posibles ERTES sobrevolando las plantillas, desde el club no les han comunicado nada. Higinio Marín, que además se recupera de una lesión muscular, prioriza la seguridad sanitaria a cualquier decisión que se tome sobre el futuro de la competición. Entendería que se llegara a dar por terminada la competición si la situación no mejora. Una solución intermedia sería disputar los partidos a puerta cerrada. "Yo el fútbol sin público no lo veo, es como el teatro sin espectadores. Sin embargo, podría llegar a comprender que por razones económicas se retomara así la competición. En cualquier caso habrá que esperar a cómo evoluciona la pandemia. Ante todo está la seguridad sanitaria". A Higinio, como la gran mayoría de futbolistas del Numancia, esto se le hace especialmente duro al estar lejos de su familia. Mientras, tratan de animarse entre toda la plantilla y están atentos a las decisiones que se puedan tomar tanto en la Asociación de Futbolistas como la Federación Española de Fútbol y la Liga de Fútbol Profesional.