La Junta General Ordinaria del Numancia ha aprobado todas sus cuentas en una sesión en la que el presupuesto pasa de más de nueve millones a unos 4,4, prácticamente a la mitad, justificado por el descenso y la pérdida de los ingresos televisivos.
Al final del ejercicio el club cuenta con 837.000 euros en pérdidas que califican como asumibles con futuros ingresos y que contrasta con los 2,5 millones de beneficios de la temporada pasada.
Se ha aprobado el punto más polémico del día con la habilitación de la compra de acciones, más de 36.000 que harían salir de la tesorería del club 1,2 millones de euros. Los accionistas presentes califican esta medida como una posible descapitalización del Numancia y Moisés Israel y la Junta Directiva lo justifican como una medida de futuro para garantizar la entrada de posibles nuevos inversores.
El momento más tenso ha sido cuando desde la mesa de la presidencia se ha insinuado que en la descapitalización del club ha tenido su parte de culpa Francisco Rubio.