En España, más de 100.000 personas tenían denegada la posibilidad de votar «por razones asociadas a discapacidad». En Soria, se calcula que son más de 700, según las estimaciones que maneja el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI). El próximo 28 de abril, en las elecciones generales,  todos, sin distinción, recuperarán su derecho a sufragio. Será de forma automática, sin necesidad de ningún tipo de gestión o trámite. A golpe de voto, se da un paso hacia una sociedad más inclusiva y se derriban las «injusticias» que el movimiento social español de la discapacidad venía denunciando desde hace años. 

Este avance será posible tras la reforma de la Ley Orgánica de Régimen Electoral (LOREG) aprobada a finales del año pasado. La modificación señala que el derecho de sufragio activo debe ejercerse de forma «consciente, libre y voluntariamente», pero el legislador no ha entrada a concretar cómo, así que la Junta Electoral Central ha emitido esta semana una instrucción donde trata de «clarificar» algunos extremos y «fijar un criterio» que puedan seguir los diferentes sujetos afectados. Entre otras cosas, advierte a las mesas que «las personas con alguna discapacidad podrán valerse de alguien que les acompañe, o de algún medio material para trasladar los sobres electorales». Yavisa a las Juntas Electorales de Zona que deberán «adoptar las medidas pertinentes» para «garantizar el voto de las personas con discapacidad». 

Se aclaran así algunas de las cuestiones que preocupaban a las entidades que trabajan con colectivos de personas discapacitadas, pero no todas. Por ello desde Plena Inclusión (red de organizaciones que vela por el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo) se ha promovido un acto a nivel regional el próximo día 28. Se llevará a cabo en todas las provincias y en Soria lo liderará Asamis (Asociación Soriana de Ayuda a las Personas con Discapacidad Intelectual y sus Familias), entidad que forma parte de Plena Inclusión y cuyos usuarios se verán afectados «prácticamente todos» por el cambio normativo, según asegura el presidente, José Miguel Celorrio. El del día 28 «será un acto reivindicativo» para «reclamar, entre otras cosas, la lectura fácil y el acceso cognitivo» en los próximos comicios, ya que «muchas veces la administración no piensa en las personas con discapacidad», recrimina Celorrio. Alude, por ejemplo, a la necesidad de facilitar el entendimiento de los carteles orientativos que hay en las mesas electorales a través de pictogramas.  

educación cívica. Al margen del acto regional, Asamis, como entidad particular, también hará actividades en el centro para ayudar a los usuarios en su estreno ante las urnas, dado que «es la primera vez que los chicos se van a enfrentar a unas elecciones» y, «al igual que nos pasó al resto la primera vez que votamos, hay que prepararles». La idea es organizar una serie de actividades sobre «educación cívica, que no partidaria» ni partidista, recalca Celorrio. «Educarles como ciudadanos sobre en qué van a consistir las elecciones, para qué se hacen, qué posibilidades tienen, qué consecuencias pueden tener, el procedimiento para poder votar (necesidad de llevar el dni, mesa que les toca...). Para ellos es novedoso y es importante  que no les pille de sorpresa, para que puedan libremente elegir, primero, si quieren votar o no. Ylos que quieran votar, que conozcan el procedimiento», especifica el presidente. Así se decidió en una reunión con las familias y, en base a ello, se celebrarán en el centro «una serie de charlas» e, incluso, se valorará «hacer un ensayo».