En una fecha tan señalada para un referente cultural tan relevante no se puede pasar por alto el papel de la Asociación de Amigos del Museo Numantino, que colaborará activamente en las actividades del centenario. Desde este colectivo se cree que el museo soriano «no se valora como se merece», ya que «tanto por su contenido como por lo que significa para conocer nuestro pasado debería ser un elemento de referencia cultural». Puede incluso que se valore más desde fuera que desde aquí, algo que suele pasar en casi todos los lugares, que no se aprecia lo que se tiene tan cerca y tan a mano.
El colectivo pone su granito de arena, pero no es algo que dependa de un grupo de personas, sino que se trata de una «dinámica social que da tiene sus bandazos». Está claro que todo lo que se haga por difundir y por adaptar determinadas actividades a determinados usuarios influye mucho y un ejemplo es la labor que se realiza ahora desde el Departamento Didáctico, que «es imprescindible». Por ello, apuntan a la necesidad de que el centro pueda contar con más recursos y espacio para la organización de actividades para todo tipo de públicos, como exposiciones temporales con más frecuencia, algo que conlleva mucho trabajo detrás, numerosos medios y una inversión económica importante. «La falta de recursos económicos y humanos es el principal problema», apuntan desde este colectivo.
En cuanto a Numancia 2017, creen que la efeméride, que debería haberse extendido en el tiempo, «se limitó a cuestiones muy concretas y muy particulares» y «no hubo un programa conjunto y de impulso al yacimiento que permaneciera». «Lo importante no es tanto hacer un acto para que suene sino invertir mucho en mantenimiento y en conservación. Puede que se esté intentando atraer gente y no tengamos en las condiciones adecuadas como para absorber un número grande de visitantes. Por eso, la labor de conservación y de investigación se está haciendo, pero hay que tener muy claro que si no cuidamos lo que queremos enseñar no merece la pena que se hagan esfuerzos por atraer visitantes, es preferible invertir en adecuar lo que queremos mantener que visitar algo que no responda a las expectativas», detallan. La investigación y la conservación son prioritarias como base para una enseñanza de calidad.
A los visitantes de Numancia se les deriva al centro del Espolón, pero no todos pasan por él, porque «ahora mismo tiene más atractivo algo al aire libre que un museo, que sigue produciendo cierto respeto». Sobre las visitas al museo, opinan que la gente de Soria no acude todo lo que debería y que la gente de fuera hace visitas apresuradas, ya que «satisface hacerte la foto e ir a otro sitio y recorrer muchos lugares en poco tiempo». «Cada museo tiene sus peculiaridades pero cuanta más difusión se haga, cuantas más actividades y visitas guiadas se hagan mejor. Pero se llega a un punto en que a la gente no le acaba de interesar y eso es lo que tendría que cambiar», añaden haciendo también referencia a un cambio de valores sociales y a una crisis que ha afectado a todo, que han hecho que los intereses de la gente sean distintos.
Además de la formación de calidad de sus socios para que puedan adoptar un criterio, la difusión y la defensa del patrimonio es un factor clave. Su interés y actividad va mucho más allá del Museo Numantino, un aspecto emblemático y donde tienen su sede, ya que sus intereses y actividades se enfocan hacia otros muchos aspectos de interés del patrimonio cultural de la provincia, que debe considerarse «una riqueza para toda la sociedad».
profundizar en patrimonio. Entre las actividades, destacan los ciclos monográficos, en ocasiones en torno al propio museo, y las salidas dentro y fuera de la provincia, siempre con explicaciones técnicas. «Abordamos temas arqueológicos, artísticos, castillos, restauraciones… Distintos aspectos que nos parecen actuales o que los socios demanden, siempre con explicaciones técnicas, no las típicas visitas guiadas. Afortunadamente tenemos entre nuestros socios gente cualificada en muy diversas materias, por lo que tenemos una importante colaboración», apuntan. La última visita fue este mes a Berlanga de Duero y la próxima será a Vinuesa-Molinos-Salduero.
Hay que hacer referencia a los grupos de trabajo que (tres de unos 12 socios) para abordar temas concretos en mayor profundidad. Destaca el de la muralla de Soria, «que nos ha llevado mucho trabajo durante varios años y de manera muy intensa pero que también ha dado muy buenos resultados». El grupo elaboró un informe exhaustivo que se trasladó a todas las instancias competentes -Ministerio de Cultura, Junta de Castilla y León, Diputación Provincial y Ayuntamiento de Soria- y a los medios de comunicación y que fue el punto de partida para profundizar en el estudio de la documentación existente. No solo sirvió para contemplar su estado y hacer una valoración, sino también para hacer una recopilación documental de la historia y la evolución de la muralla. Además, se amplió el ámbito al Castillo y a la ciudad de Soria.
La asociación organizó sobre el tema unas jornadas de sensibilización ciudadana, con campañas y charlas en los centros docentes, con la colaboración de la Dirección Provincial de Educación. «Hace años la gente decía que la muralla era un montón de piedras mal puestas y ahora hay ya proyectos, por lo que es importante», afirman desde la asociación destacando que haya salido adelante el proyecto del Ayuntamiento de Soria para su puesta en valor. «Estamos encantados de que asuma la conservación de la muralla como un bien indispensable de la ciudad», afirman. Aparte del informe, este mismo año se ha publicado un libro sobre la muralla con la recopilación documental, fruto de ese trabajo tan «laborioso y callado», que al final ha dado sus frutos, por lo menos a nivel de concienciación ciudadana. Las publicaciones son otro aspecto fundamental de esta asociación.