Asden defiende su actuación en el 'caso Layonair'

EDS
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Asden propone que Layonair se ubique en las 389 hectáreas rústicas sin recalificar del Soto de Garray (Soria). Los ecologistas requieren a los representantes de la Diputación y la Junta que verifiquen si este proyecto es viable

Asden defiende su actuación en el 'caso Layonair' - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez. Eugenio Gutiérrez Mar

El portavoz de la Asociación Ecologista soriana (Asden), Carlos González, aclaró hoy que el colectivo no está paralizando ningún proyecto industrial en Soria, y recalcó que la empresa Layonair, que pretende instalar en la Ciudad del Medio Ambiente un taller de aviones, puede hacerlo solo, por sus dimensiones y dado que debe utilizar la pista de aterrizaje del aeródromo de Garray, en las 389 hectáreas rústicas que están sin recalificar, un terreno que no está dentro del judicializado Parque Empresarial del Medio Ambiente (PEMA).

Carlos González instó al Ayuntamiento garreño y a la Junta de Castilla y León a iniciar “ya” el trámite administrativo oportuno y recalificar este terreno de casi 400 hectáras anexo al aeródromo de Garray para que la empresa, que promete crear 500 empleos cualificados pueda invertir en Soria.

Además, agregó que la instalación de esta empresa no depende en nada del recurso que los ecologistas presentaron en el Tribunal Supremo mediante el que requieren el derribo de las Cúpulas de la Energía, por ubicarse en zona inundable. Este recurso frenó, según la Diputación de Soria y el Ayuntamiento de Garray, el desarrollo de este parque industrial.

El colectivo ecologista sostuvo que es viable su ejecución, aún manteniendo el recurso ante el Tribunal, y reiteró su preocupación porque se les culpe de frenar el desarrollo industrial de Soria.

“Se retire o no se retire esa área hay que recalificarla y urbanizarla. Nosotros decimos avancen ya en el tema de la urbanización para poder ampliar la pista de aterrizaje, para hacer los hangares y el museo histórico de la aviación”, expuso.

Carlos González subrayó que las zonas del PEMA no sirven para hacer “grandes actuaciones aeronáuticas, puesto que la zona sur es arbolada, está protegida y tiene un río y la orografía del terreno impide hacer una pista de aterrizaje. “Si se hace allí no sería el parque del medio ambiente”.

Respecto al sector oeste, donde está instalada Aleia Roses y la planta de biomasa, según Asden solo puede soportar industria, es decir, que no tiene capacidad suficiente en terreno como para ubicar el proyecto aeronáutico.

“La mayor parte de las actuaciones que plantea Layonair no pueden realizarse en la zona judicializada. Si el recurso del PEMA sale favorable a la Junta se ampliaría estas dos últimas zonas y si el recurso es contrario a la Junta el proyecto estaría plenamente desarrollado en el sector de 389 hectáreas de suelo rústico”, aludió.

Asden consideró, además, que la documentación aportada por la empresa ni es “concreta, ni fiable, ni determina inversión alguna”, por lo que pidió a las instituciones que verifiquen si el proyecto es viable y no se limita a tratar de captar subvenciones públicas y marcharse al tiempo como ocurrió en otras ocasiones.

“La Diputación de Soria se gastó 1,3 millones de euros en hacer una pista de aterrizaje en el aeródromo de Garray porque se iba a crear una escuelas de pilotos y azafatas; la empresa que lo propuso vino y no creo nada. Pasados los años, otra filial iba a convertir el aeródromo en un empresa de transporte de mercancías con aviones para crear líneas de paquetería entre Zaragoza-Soria y Pamplona. Era una instalación modélica internacionalmente que nunca llegó. A esta empresa se le quitó la concesión porque no pagaba la cuota”, recordó el portavoz para expresar sus dudas con respecto a este proyecto y llamar a la cautela a los políticos sorianos con respecto al proyecto.

Por último, insistió en que Asden está dispuesta al diálogo, y mantuvo que no retirará el recurso ante el Tribunal Supremo.