La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) no prevé “grandes cambios” en algunso de los sistemas de explotación que se encuentran en una situación “más comprometida” a día de hoy, como son los casos de los sistemas Adaja, Tormes y Águeda, siempre a la espera del informe mensual de sequía del mes de octubre, mientras que las condiciones actuales apuntan a una “ligera mejoría” en el caso de los sistemas Pisuerga y Carrión, aunque aún es “insuficiente” para abandonar la situación de sequía prolongada.

Aunque la lluvia y la nieve de los últimos días han contribuido a un cambio de tendencia, con 124,8 hectómetros cúbicos más de agua embalsada desde el pasado 1 de octubre, desde el organismo de cuenca se advierte de que aún es pronto para hacer una previsión de cara a la próxima campaña de riego.

En la Comisión de Desembalse celebrada hoy, también se destacó desde la CHD el compromiso con los regantes de la cuenca del Adaja, que sólo pudieron disponer de 2.100 metros cúbicos por segundo esta campaña, a la vez que se reconoció que se trata del sistema más afectado por el déficit de precipitaciones.

Mientras el conjunto de los embalses gestionados por la CHD se encuentran hoy de media al 38,9 por ciento de su capacidad, valores medios de la última década, el pantano abulense de La Cogotas, en el Adaja, sólo almacena un 12 por ciento, más de 20 puntos por debajo de la media de la década y 34 por debajo de los niveles del año pasado.

Por último, la Comisión de Desembalse aprobó en su sesión de hoy la propuesta de llenado de los embalses para el año hidrológico 2019-2020, fijando los resguardos mínimos sin novedades respecto al año anterior.