El Numancia recibía al Europa en Los Pajaritos en un partido en el que buscaban sanar las heridas de la derrota ante el Badalona y seguir con la racha inmaculada en casa. El encuentro, por cierto, comenzaba con media hora de retraso por un problema informático en los certificados  COVID de los visitantes.

Precisamente el conjunto catalán salía más enchufado y liderados por David Jiménez contaban hasta con tres ocasiones que obligaban a intervenir más de lo normal a Isma Gil en el primer cuarto de hora.

Diego Martínez insistía a los suyos en tener la pelota y por medio de la posesión acababan con sus problemas en defensa y poco a poco probaban a David Troya. Diego Suárez lo intentaba con un flojo disparo y antes de la medida hora Agüero veía como le anulaban de forma correcta un gol en posición adelantada.

Con el paso de los minutos los rojillos iban imponiendo su dominio y Cotán se encontraba con el palo en el minuto 35 tras un buen contraataque de los locales.

Al borde del descanso el acierto en las áreas daba un golpe de efecto al partido. Troya hacia un auténtico paradón a un buen disparo con el interior de Jordi Tur, y cuando parecía que no había tiempo para más, un córner de David Jiménez entraba de forma directa en la portería sin que la defensa ni Isma Gil reaccionasen. Con ese tanto los equipos se iban a vestuarios con una clara preocupación en la grada soriana.

Quedaban 45 minutos para volver a poner a prueba la capacidad del Numancia de sobreponerse a un nuevo contratiempo como local y la reacción fue inmediata. Una gran jugada de Jordi Tur acababa en un mejor disparo al palo largo para empatar el partido en el minuto 53.

Espoleado por el tanto, el equipo local dominaba el partido y Diego Suárez mandaba fuera por poco su disparo, para que después Jaume Pol perdonase con todos a su favor tras un centro de Cotán.

A falta de 20 minutos los de Diego Martínez bajaban de nuevo una marcha y comenzaban a sufrir. El árbitro perdonaba la segunda amarilla a Adri Crespo e incluso Jaume Pol tenía que sacar un balón en la misma línea. Se veía al equipo cansado o al menos eso parecía.

El Europa tenía el balón y dominaba. A falta de nueve minutos tenía incluso bola para ganar el partido. Con todo a su favor Jordi Cano no podía con Isma Gil que pasaba de villano a héroe y realizaba un auténtico paradón a bocajarro.

No estaba el Numancia en los últimos minutos y de nuevo a balón parado los visitantes se ponían por delante gracias a un cabezazo de Riqui Vidal libre de marca.

No había reacción de los de Diego Martínez que ofrecían un inofensivo final de partido para sumar su primera derrota en casa en una de las actuaciones más preocupantes del Numancia en lo que va de temporada.