Los hechos tuvieron lugar en noviembre de 2017, cuando el acusado convivía con su pareja sentimental y las dos hijas de ésta, de 10 y 13 años, en San Esteban de Gormaz. La Fiscalía acusa al hombre de un delito continuado de abusos sexuales, por lo que exige una pena de privación de libertad de seis años, además la prohibición de residir en la misma localidad que la menor, acercarse a ella a menos de 300 metros y comunicarse con ella a través de cualquier vía durante los próximos 16 años, además de 3.000 euros por los daños morales.
Las medidas cautelares para alejar al acusado de la víctima ya fueron decretadas por el Juzgado el 22 de diciembre de 2017, que ya incluían la prohibición de residir en la localidad del Burgo de Osma, la prohibición de acercarse a la menor a una distancia inferior a 300 metros y de comunicarse con ella a través de cualquier medio o procedimiento.
Hoy ha comenzado el juicio a puerta cerrada en la Audiencia Provincial de Soria, que continuará durante la jornada de mañana.