La ONCE (Organización Nacional de Ciegos Españoles) nace en 1938 para prestar servicios sociales a los ciegos de España. Hace apenas unas semanas, la ONCE estrenó en Soria su nueva sede, en la plaza San Clemente. Al mismo tiempo, presentaba a su nueva directora de la Agencia de Soria, Leire Cayero Garay. 

¿Cómo ha sido su llegada a Soria?

El 1 de marzo abrimos al público el centro y los primeros días han sido de puesta en marcha y de dar a conocer a los afiliados que estamos aquí y estar con ellos, retomar esa relación que supone tener un centro físico abierto, ya que llevábamos ya unos años sin un centro en Soria.

Para la inclusión es fundamental dar visibilidad. ¿La apertura de esta nueva oficina surge precisamente para eso, para ganar cercanía con los afiliados y visibilidad en la sociedad?

Realmente la cercanía nunca se ha perdido porque, aunque no tuviéramos una sede física, se seguía atendiendo a los afiliados ya que los técnicos viajaban hasta aquí y atendían en los domicilios o en otros espacios. Pero, evidentemente, que la ONCE esté en Soria va a ayudar a visibilizar el mundo de la ceguera, de la discapacidad visual y de la discapacidad en general. 

¿A cuántos afiliados llega la ONCE en Soria? ¿Y existe un perfil marcado en la provincia?

Estamos atendiendo a 104 afiliados. El perfil de la persona afiliada son aproximadamente 50% hombres y 50% mujeres, la gran mayoría vive en Soria capital y el grueso son personas mayores. 

Afortunadamente, la medicina va avanzando y muchas enfermedades visuales se van evitando o se van corrigiendo, por eso la gran mayoría de los afiliados son personas mayores. 

¿Afecta también el envejecimiento de la población de Soria?

También tiene que ver que aquí la población es más envejecida y la población joven de Soria tiende a irse otras ciudades. Realmente estamos ante la España Vaciada. 

Cuando hablamos de ONCE solemos pensar en la venta de cupones pero realmente la ONCE es mucho más, son todos esos servicios que se ofrecen a las personas con discapacidad. ¿Qué supone la venta de los cupones en una provincia como esta? 

Realmente la venta de lotería para nosotros es fundamental porque es de donde vienen los recursos. Dentro de las loterías está el cupón diario, de viernes y de fin de semana y, a parte de eso, también tenemos otros juegos, que son los ‘rascas’ (la lotería instantánea) y los juegos activos, como por ejemplo el Eurojackpot del viernes. Esas son nuestras fuentes de ingresos. De ahí la ONCE obtiene los recursos para luego poder destinarlos a todos nuestros servicios sociales, que realmente es nuestra razón de ser. Si no prestásemos esos servicios, no tendríamos la licencia para vender productos de juegos. 

¿Qué servicios ofrece la ONCE en Soria en estos momentos?

Tenemos varias áreas pero hay dos ejes prioritarios para nosotros, el empleo y la educación de las personas ciegas o con deficiencia visual grave. 

El área de empleo la coordina el técnico de empleo y ayuda a las personas afiliadas en la ONCE a la búsqueda de empleo, bien dentro del grupo social ONCE o fuera. 

En el área de educación tenemos a los maestros y a todo el equipo que ayuda a los niños, adolescentes o jóvenes en la etapa universitaria para que la ceguera no sea una barrera y que puedan cursar sus estudios. 

Además, hay una trabajadora social y, también, una técnica de rehabilitación cuyo trabajo es fundamental porque nos ayuda en la vida diaria para que la ceguera no nos impida hacer tareas cotidianas. Por ejemplo, ayuda en los desplazamientos, bien con bastón, con perro guía o con nada (con técnicas), para movernos con autonomía; ayuda también en casa para adaptar los electrodomésticos... en definitiva, ayuda en todo lo que supone el día a día. 

Luego hay una psicóloga que nos ayuda en la aceptación de la ceguera, a asumir esta realidad. Nos ayuda en ese proceso porque muchas veces vienen cuando son mayores, cuando han perdido la vista por un accidente, por una enfermedad... y nos encontramos con personas a las que les cuesta aceptarlo. 

Hay también en Soria dos instructores de tiflotecnología y braille, que llamamos comúnmente tiflo. Tiflo viene del griego y significa ciego. Hay una serie de herramientas (algunas propias de ONCE) y el tiflo es la persona que nos ayuda a utilizarlas para poder acceder a la información, bien a través de la tecnología (ordenadores, móvil...), bien a través del braille, porque el tiflo también es profesor de braille para adultos. Matizo lo de  «para adultos» porque en los niños se hace de otro modo, desde el área de educación. Tenemos colegios especializados de ONCE y, si fuera necesario, pueden ir ahí un corto periodo de tiempo para aprender braille y, luego, poder volver a su cole ordinario donde, a través de la maestra de ONCE, se hace un seguimiento. 

Entre los servicios tenemos también una técnico de animación sociocultural que ayuda a organizar todas las actividades de deporte, ocio y cultura para las personas afiliadas. Ahora mismo todas las actividades se están haciendo de forma on line y, por ejemplo, tenemos ajedrez, yoga, tertulia, taller de memoria, Goalball [es el único deporte paralímpico creado específicamente para personas ciegas], charlas culturales todos los miércoles...

¿Qué equipo integra la ONCE en Soria? ¿Cuántas persona trabajan en la delegación provincial?

Somos la psicóloga, la maestra, la trabajadora social, el TR, el tiflo, el técnico de empleo, la animadora sociocultural y la administrativa y yo. Nueve personas en la parte de servicios pero, además, nos apoyamos también con otros centros. 

Y luego está el equipo de juego, que tiene otra estructura. Está integrada en esta sede también pero esa estructura se dedica específicamente a los vendedores. Puede ser que ambas estructuras se comuniquen cuando hay vendedores con ceguera que se integran. 

Los servicios que ofrece la ONCE en Soria a sus afiliados, ¿son accesibles a otras personas con discapacidad?

Son solo para afiliados. La ONCE solo puede prestar servicios a personas afiliadas con ceguera o deficiencia visual grave. Para las demás discapacidades tenemos la Fundación ONCE. 

La ONCE destina una parte de sus beneficios a la Fundación ONCE y ahí sí que se atiende a todas las demás discapacidades y ahí también hay dos ejes fundamentales, la formación y el empleo. 

En cuanto a la estructura de la parte de juego, lo comentaba usted antes, la venta de lotería es lo que permite a la ONCE coger músculo para poder garantizar sus servicios. ¿Cuántos vendedores hay en Soria y qué requisitos se pide para poder ser vendedor de la ONCE?

Ahora tenemos una plantilla de 30 personas. En cuanto a los requisitos, hay que tener una discapacidad igual o superior al 33%, tener ganas de trabajar, tener un perfil comercial, un perfil que le guste estar con las personas, activo... Ahora mismo necesitamos personal para el área de Almazán y el de San Leonardo de Yagüe, así que me gustaría hacer un llamamiento por si hay alguien interesado en cubrir esos puestos. Para ambos se necesita disponer de carnet de conducir y de coche porque van a tener pueblos a su cargo. 

¿Qué números manejan en Soria en cuanto a venta de lotería? ¿Se han visto afectados por la pandemia?

Aproximadamente se están vendiendo unos 7.000 euros diarios y evidentemente la pandemia ha afectado muchísimo. Hemos estado tres meses sin vender cupón y los vendedores tuvieron que ir a ERTE y, obviamente, la ONCE se ha visto muy resentida y, de hecho, la apertura de este centro ha salido adelante con un gran esfuerzo. 

¿Cómo valora la accesibilidad de la ciudad para personas ciegas o con deficiencia visual?

La ciudad por el centro es bastante accesible, pero sí que es verdad que la accesibilidad universal es difícil de conseguir. Precisamente por ello desde la ONCE estamos trabajando para que, conjuntamente con el Ayuntamiento y con el resto de entidades, se tenga en cuenta esa accesibilidad a la hora de asumir nuevos proyectos. Y no solo para personas ciegas, sino accesibilidad para todo el mundo. Una ciudad sin obstáculos, sin escalones, sin barreras... que sea accesible para mayores, niños, ciegos... para todos;una ciudad donde las barreras físicas no nos impidan hacer las cosas, vivir. En esa línea queremos trabajar. 

Cuando salimos al medio rural ¿se gana o se pierde accesibilidad?

En el medio rural la accesibilidad se complica. 

¿Desde el Ayuntamiento, desde la Diputación... se han ofrecido para que puedan trabajar de la mano en proyectos conjuntos?

Sí y, de hecho, estamos pendientes de empezar una iniciativa de manera conjunta. Más que empezar sería seguir, porque realmente ya se han hecho algunas cosas en torno a la accesibilidad. Nosotros, además, tendemos la mano a todas las entidades -públicas o privadas- que requieran información o asesoramiento en materia de accesibilidad, porque muchas veces no se hace bien pero es por falta de información y formación. 

Desde la ONCE estamos siempre dispuestos a firmar convenios en este sentido y, de hecho, ya estamos trabajando aquí con algunos centros y tenemos proyectos abiertos en torno a la accesibilidad. 

¿Ya tienen proyectos en marcha? ¿Con centros públicos o privados?

Públicos y privados, de todo tipo. De hecho, estamos trabajando por ejemplo con algún bar para ofrecer sus cartas en braille o con un código QR accesible para las personas ciegas a través de un lector de pantalla. Es cierto que algunas de estas opciones no funcionan con el colectivo de sordoceguera y el único canal de recibir información para ellos es el braille porque ni ven ni escuchan bien. Por eso estamos abiertos a todas las personas que nos piden asesoramiento, para estudiar cada caso y hacerlo bien, ya que además a veces se transcribe mal y el afiliado recibe mal la información. Les ponemos en contacto con la Unidad de Braille de la ONCE. 

En la ciudad se ha hecho un esfuerzo inversor importante en los últimos años para ampliar la peatonalización del centro, eliminar barreras arquitectónicas... No obstante, desde algunos colectivos han criticado algunos aspectos como el uso de adoquines. ¿Comparte esta crítica?

El centro de la ciudad es accesible pero es verdad que es una ciudad empedrada y hay algunos cantos o esquinas que habría que mejorar. Yo, por ejemplo, soy usuaria de bastón y, en una ciudad empedrada como esta, te obliga a usar otro tipo de puntera porque se engancha, pero creo que el centro de la ciudad sí que es bastante accesible. Y lo que vayamos observando se intentará mejorar. 

Soria cuenta con siete estudiantes ciegos o con discapacidad visual, ¿los centros educativos de Soria y la Universidad están concienciados y adaptados en accesibilidad?

La accesibilidad universal, como decía antes, es muy difícil de conseguir, pero lo cierto es que no he recibido quejas al respecto. No obstante, si cualquier centro está interesado en hacer un proyecto de mejora, nosotros les tendemos la mano para ayudarles. De todos modos, las personas ciegas que acuden a esos centros pueden hacerlo generalmente sin problemas ya que, gracias a la técnico de rehabilitación, les enseña las rutas más accesibles, el camino para que de manera independiente y autónoma puedan llegar sin barreras. 

Comentaba que uno de los ejes es el empleo. Si una persona ciega o con deficiencia visual quiere trabajar en Soria, ¿es posible? ¿Hay opciones más allá de trabajar en la propia ONCE?

Puedes trabajar en la ONCE si eres afiliado, y también si eres una persona con discapacidad igual o superior al 33%. 

En cuanto a nivel privado, hay que reconocer que Soria es una ciudad pequeña y con muy poca industria y las oportunidades son limitadas, pero ¡claro que se puede trabajar! Si el perfil del afiliado encaja con el perfil que se busca, sí que habría posibilidad, pero es verdad que las oportunidades en Soria no son muchas, pero no por la ONCE o no por los afiliados, sino porque no hay. 

Al final, ¿la mayoría de los afiliados se ven abocados a trabajar para la ONCE o en la ONCE?

No tiene por qué. 

Y los empresarios sorianos ¿están concienciados a contratar a una persona con discapacidad visual y a adaptar el puesto si es necesario?

En eso estamos y hay que reconocer que ha cambiado mucho la concienciación. Es cierto que hace unos años se pensaba que una persona ciega igual no era tan capaz, pero ahora ya se ha demostrado que no es así y que una persona ciega es absolutamente capaz; y que la ceguera, gracias a la ONCE, no va a ser limitante porque, además, todas las adaptaciones al puesto o al estudio las hace la ONCE sin mayor coste para la empresa ni para la persona afiliada. 

Comentaba antes cuando hablaba del perfil del afiliado en Soria que es gente mayor. Estamos en una provincia que se caracteriza por estar muy envejecida y muy despoblada, de modo que a veces se suma también la soledad. ¿Cuál es la situación para esas personas que quizá necesitan más labor social, más acompañamiento...?

Nosotros intentamos estar muy cerca de las personas mayores y, sobre todo, de las personas mayores que están solas, porque la ceguera cuando se junta con la soledad es terrible. A través de un plan específico que tenemos estamos muy pendientes de estas personas que viven solas, por si necesitan algo, por si requieren del servicio de voluntariado... 

¿Cómo funciona el voluntariado en la ONCE?

Para nosotros es muy importante y, de hecho, tenemos un programa que abarca varias áreas de voluntariado. 

Una de las cosas que hacemos a través de voluntariado es ese acompañamiento de esas personas que están solas que hablábamos antes, por si necesitan desplazarse a algún sitio, por si necesitan leer algo y no se manejan bien con las tecnologías, por si necesitan ayuda para algo concreto... 

Desde aquí quiero hacer también un llamamiento para que cualquier persona que quiera ser voluntaria se acerque a nosotros porque necesitamos voluntarios, sobre todo en la zona de Covaleda. 

¿Cuántos voluntarios tienen ahora en Soria y qué requisitos son necesarios para ser voluntario?

En ONCE Soria tenemos unos diez voluntarios ahora. 

No hacen falta requisitos concretos. Cualquier persona puede ser voluntaria, también personas con discapacidad. Solo hace falta realmente tener ganas de ayudar, porque la ONCE se encarga de todo lo demás y ofrece una formación. Luego tenemos varios programas de voluntariado que se adaptan a la disponibilidad de cada persona, a sus habilitadas, a sus horarios. Hay voluntarios de acompañamiento que decía antes, hay voluntariado de acompañamiento telefónico, de perro guía (para ayudar a los afiliados que tienen perro cuando los sacan a hacer sus necesidades o los dejan sueltos, ya que ese momento puede generar cierta tensión por si se va el perro), deportivo... Según cada persona y su situación se puede adaptar el voluntariado. 

¿Quién puede tener un perro guía y cómo se accede a este servicio?

Se accede a través de la ONCE, ya que tenemos una Escuela de perros guía en Madrid. La demanda de perro guía es muy alta y los recursos son limitados. La Escuela de perros guía recibe los recursos de ONCE y va repartiendo los recursos disponibles en función de las prioridades. Quien más lo necesita lo tiene primero. 

Ahora que ya conoce un poco más la situación de Soria. ¿Qué cree que necesitan los afiliados de la provincia? ¿Por dónde se debe trabajar?

Debemos seguir en la línea de la educación y el empleo. Que los chavales no dejen de estudiar por la ceguera. Es cierto que el fracaso escolar en niños ciegos es hoy muy bajo, está en el entorno del 3%, y es importante seguir por esa línea. Porque es fundamental que la ceguera no sea un freno, que no impida estudiar y no impida crecer y alcanzar su talento y sus sueños para, en un futuro, poder insertarse en el mundo laboral, sea en Soria o donde sea. 

Afortunadamente, tanto en educación como en inserción laboral se ha avanzado mucho en los últimos años a nivel social, ¿no?

Sí. Ahora desde la ONCE apostamos por que la persona afiliada esté totalmente integrada. Antiguamente se estudiaba toda la etapa educativa en los colegios de ONCE pero eso hoy ha cambiado y solo van al colegio ONCE aquellas personas que en el colegio ordinario se están quedando atrás por el tema de la ceguera. Si ocurre eso, van un tiempo al colegio ONCE, aprenden braille, a utilizar la tecnología accesible... y, una vez que han aprendido lo básico, regresan a su colegio ordinario con el apoyo de la maestra. Ahora, como máximo, los niños se quedan dos años en los colegios ONCE. Eso ha cambiado porque desde ONCE se vio que hacer toda la etapa educativa en un colegio específico podía aislar. Lo que queremos es que la gente pueda estar en su barrio, con su gente, con su familia... totalmente integrado. 

A nivel laboral, ¿también se aprecia un cambio social y que el horizonte va ya más allá de los límites ONCE? 

También, sí. Antes, si tenías ceguera, la venta de cupones estaba ahí. Hoy en día, gracias al equipo de servicios, intentamos desarrollar tu talento y que tú puedas hacer lo que quieras hacer, lo que realmente te apasione. 

La ONCE se ha convertido en la primera organización social del mundo. ¿Se sienten queridos y reconocidos por la población soriana?

Sí, muy queridos. La verdad es que la ONCE ya tiene muchos años de trabajo y al final ha demostrado que estamos por y para la gente. Eso, al final, se nota. Yo personalmente siento que la bienvenida ha sido muy buena. 

Si tuviera que resumir en una palabra qué es la ONCE, ¿qué diría?

Es complicado [se queda pensativa]. Para mí la ONCE es ilusión. 

¿Hace mucho que usted llegó a la ONCE?

Llegué por primera vez en el año 2016. Primero entré como afiliada. Como trabajadora de ONCEllevo algo más de un año.

¿Cuáles son sus metas o retos como directora de la ONCE en Soria?

Seguir trabajando en los dos ejes fundamentales, la educación y el empleo; y que nuestros vendedores estén lo más contentos posibles porque, al final, si los trabajadores están bien, va a ser mejor  para la ONCE ya que va a haber más recursos para poder ofrecer servicios a los afiliados. Desde la sede queremos poder facilitar todo lo que necesiten a los vendedores y a los afiliados, queremos seguir trabajando en temas de accesibilidad y, sobre todo, queremos estar con las personas, que al final es de lo que se trata. 

Y, también, lo que comentaba antes, es importante el tema de la captación de voluntarios y de personas que puedan trabajar en la venta de lotería, porque tenemos necesidad de cubrir esas dos áreas.

«No se trata de tener derecho a ser iguales sino de tener igual derecho a ser diferentes». Es una frase suya. ¿Tener los mismos derechos cuesta?

Para mí es una frase importante porque define mi esencia y también la de la ONCE. Al final no es malo ser diferente y todos tenemos nuestras cosas buenas y malas, y lo que tenemos que descubrir es nuestro talento y aprovecharlo al máximo. Al final, tener una deficiencia visual, o de cualquier otro tipo, no debe limitarte en lo que quieras hacer y ser. Es importante también apoyarte en tu gente y poder tirar hacia adelante.