Momento decisivo para cientos de alumnos. Para los que se tiene tienen que examinar de la Ebau (Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad) y para aquellos que finalizan su formación universitaria y están a un paso de sumergirse en el mercado laboral. Ana Isabel Lozano es técnica del Departamento de Personas y Alumni de la Fundación General de la Universidad de Valladolid (Funge) en el Campus Duques de Soria (anaisabel@funge.uva.es). La Funge, que cumple 25 años, se encarga de la gestión de diversos recursos e infraestructuras universitarias con el fin de promover, de manera eficaz, la relación entre la universidad, la sociedad y las empresas de su entorno. Entre sus programas destacan los dirigidos a la inserción laboral y al desarrollo profesional de los estudiantes y los egresados, además de asesorar a empresas e instituciones en el proceso de incorporación al trabajo de jóvenes universitarios y de gestionar prácticas en empresas y ofertas de empleo, así como tareas de orientación y formación. «No queremos que tras finalizar la universidad nuestros titulados pierdan el contacto con la UVa», asegura, y por ello, se va a impulsar ‘Alumni UVa’, que tiene como objetivo de promover y mantener vínculos estables y dinámicos entre la universidad y sus egresados. Funge en Soria también gestiona cursos de formación complementaria a los grados y máster, proyectos de investigación, cursos de idiomas (chino, alemán, italiano, francés y varios niveles de inglés), se hacen pruebas de nivel de Acles y exámenes dos veces al año para acreditar idiomas en becas Erasmus.

¿Qué empleos son los más demandados por las empresas y los titulados universitarios sorianos?

Los alumnos cuando acaban la titulación si quieren hacer prácticas o buscar ofertas de empleo a través de Funge tienen que registrarse en la plataforma. Recibimos las ofertas de las empresas, para cualquier titulación, aunque es verdad que unas son más demandadas que otras. Y en algunas no encontramos gente. Desde la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Soria y desde los servicios de salud de otras comunidades cercanas nos están pidiendo personal de Enfermería porque, además de que nuestra formación es de calidad, no hay. Nosotros nos encargamos de intermediar. Las empresas nos manda un perfil y nosotros sondeamos en la base de datos, les enviamos la oferta  a todos los candidatos que cumplen con el perfil y, si están interesados, nos dan su consentimiento para que enviemos su curriculum. 

Soria necesita personas para seguir progresando. Por ejemplo, actualmente, las empresas necesitan con urgencia ingenieros y no se encuentran. Muchas veces se dice que no hay empresas en Soria, pero luego no encuentran personal cualificado que quiera venir o quedarse en Soria. Es más, alguna empresa con varias sedes sacando la misma oferta en Soria y en Madrid, dotando de mayor remuneración la de Soria que la de Madrid, encuentran interesados para Madrid y ninguno para Soria. Necesitamos personal cualificado en Soria, pero ya. Quizás aquí no ven una carrera profesional a largo plazo, creen que tienen más posibilidades fuera, y si se van a estudiar fuera, pues se buscan la vida fuera... Supongo que es por esto, pero hay que cambiar ese chip.  

¿Cree que se puede cambiar?

No hay una fórmula mágica, entiendo que es la mentalidad. Los jóvenes creen, cuando acaban la carrera, que tienen que tener una proyección profesional, pero no solo es eso, hay que buscar una calidad de vida. Muchísima gente malvive en Madrid. Las ciudades medias son el futuro, tendríamos que pensar que una ciudad como Soria, tan asequible y accesible, es ideal para vivir. Igual no puedes ser director ejecutivo de una gran empresa en Soria, pero hay que valorar otras cosas. La pandemia nos ha enseñado a que hay otras formas de vivir que no sea siempre corriendo y estresados.

¿Y no se ha notado ya la pandemia en un giro de tendencia? 

Es pronto para hacer esa valoración. La dinámica que se ha mantenido es marcharse fuera porque se cree que existen perspectivas de mejora a largo plazo y en Soria, no. Mucha gente se ha venido a teletrabajar. Por eso hay que llevar las telecomunicaciones a todos los pueblos de Soria. Si tenemos una base que nos permita el teletrabajo, ahora mismo hay muchísimos empleos que son factibles de ser descentralizados. 

Las empresas no encuentran ingenieros en Soria, pero está el caso de Enfermería que ha agotado las bolsas de empleo y se está esperando a que termine el curso para incorporar a recién titulados. ¿Cómo se ha notado la pandemia en las titulaciones de la Facultad de Ciencias de la Salud?

En Fisioterapia no tanto, porque es mucho de contacto y eso se perdió. Enfermería claro que está muy demandada. No hay bolsa, no hay gente, todo el mundo busca por los rincones de España. Es una titulación que, desde antes de la pandemia, ya estaba demandada, lo único que antes eran contratos de verano y ahora son más estables. 

Cuando termine el curso en Soria, ¿cuántos enfermeros tendrán trabajo cuando acaben el grado?

Todos los que salgan, seguro. Los están esperando. No sé si todos en Soria, pero nos llegan ofertas de muchísimos sitios: Castilla y León, La Rioja, Navarra, País Vasco... Además, la Facultad de Soria tiene mucha fama porque se hacen buenas prácticas en el complejo hospitalario y los enfermeros de Soria están muy solicitados.

En el caso de Enfermería, ¿existen las mismas reticencias por parte de los egresados para quedarse en Soria como ocurre con las ingenierías?

También buscan fuera, porque hay mucha gente que estudia en Soria que es de fuera y regresan a su lugar de origen. También pasa con Traducción e Interpretación, que tiene muchos alumnos de fuera, y en Educación... acogemos a bastante gente de otros sitios en cualquier grado.

De los grados que se imparten en el Campus de Soria, el de Enfermería es el que mejor inserción laboral tiene, ¿y cómo están el resto?

Como salen pocos titulados, en seguida tienen empleo. No sé si todos encuentran conforme a su formación  o son contratos en práctica de inferior categoría. Las carreras de humanidades, como Educación, quizás tienen menos inserción a corto plazo porque están más encaminadas a opositar y optar a una plaza pública. Infantil tiene más tirón con las guarderías, pero puede que estén contratados como técnicos. Con el nuevo Grado de Ciencias de Actividad Física y del Deporte habrá que ver la inserción que tiene. Es importante que crezcamos en grados. Los titulados de la Eifab también tienen trabajo asegurado, son ingenieros. Y la Facultad de Ciencias Empresariales y del Trabajo tiene mucho tirón para gestión de empresas y recursos humanos.

¿Es mejor ampliar la oferta universitaria o consolidar lo que tenemos?

Una nueva titulación implica contratar profesores y personal, que tenga demanda, que tenga una continuidad... Creo que deberíamos tener más sinergias con FP. Si vemos que hay un ciclo de informática que tiene mucha demanda y se lo rifan, también de fuera de Soria, de donde vienen consultoras y empresas a buscar gente a los institutos, quizás debemos valorar un grado universitario que le diera continuidad. O si vamos a tener un Centro de Proceso de Datos, que tendrá una serie de plazas que habrá que cubrir.

Es cierto, y se ha comprobado, que repetir titulaciones en los distintos campus no es lo ideal y, por tanto, debemos, por el momento, mantener o especializar con másteres adaptados a las necesidades del mercado, las titulaciones que ya se imparten y que son interesantes para la provincia, ya que atraen y estabilizan población.

¿En qué consisten los programas de prácticas que gestiona Funge?

Actualmente, tenemos programas tanto nacionales como internacionales. Está en marcha el programa ‘ViveEuropa’ que está vinculado al de Garantía Juvenil de la Junta. A los usuarios se les da la oportunidad de hacer prácticas en empresas de la Unión Europea. Ahora estamos con 20 prácticas. En Soria ha finalizado en mayo el programa con el Ayuntamiento y en  breve firmaremos con otra institución para otro programa de prácticas que llegue a toda la provincia. Los beneficiarios están seis meses formándose y  la empresa viendo cómo funcionan. Desde 2017 que empezó el convenio con el Ayuntamiento de Soria la inserción ronda el 100%. Luego tenemos prácticas del Ecyl (90 en los cuatro campus de la Universidad de Valladolid, de las que doce están en marcha en Soria). Distintas empresas de Castilla y León solicitan prácticas de FP y titulados universitarios están seis meses y tienen la posibilidad de quedarse. Es la forma de probar a la gente.

Y ‘Competencia-T’es el programa de la Unidad de Empleo de la Universidad de Valladolid y está abierto todo el año, se gestiona a través de un fondo de becas. Las empresas solicitan un perfil, hacemos la preselección y la empresa selecciona a los candidatos. Vamos a cambiar la normativa porque era solo para alumnos de la Universidad de Valladolid, pero tratamos no solo de retener talento sino de atraer y como tenemos pocos candidatos para algunos perfiles, lo tenemos que abrir a estudiantes de FP y de otras universidades. Casi todo el mundo que estudia una carrera tiene asegurado el puesto de trabajo. Ha vuelto una reactivación económica, las empresas se han tecnificado y digitalizado, y hay mucha demanda de perfiles cualificados para que se ocupen de todos esos procesos nuevos.

¿Cómo es la colaboración con las empresas de Soria para ejecutar todos estos programas de prácticas?

Fantástica. No hay problema. Para una empresa es más fácil contratar a una persona que sabes que va a funcionar porque la has tenido de prácticas, le has enseñado y supervisado. Supone un esfuerzo por parte de la empresa, pero la contraprestación es que, después de seis meses formándolo, si sirve, lo contratan, ya no necesita un periodo de prueba.

¿Y con las instituciones?

Tenemos buena relación tanto con FOES (Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas) como con la Cámara de Comercio, hemos participado también en la Mesa de Empleo de Garantía Juvenil de la Junta, colaboramos con los sindicatos, con Cruz Roja... con todas las instituciones de Soria la colaboración es buena.

¿Puede avanzar algo de ese nuevo convenio que se va a firmar?

La idea es retener y atraer talento, que es lo que nos hace falta. Y que las empresas de toda la provincia tengan acceso a titulados universitarios, que puedan probarlos y contratarlos.

Los alumnos de segundo de Bachillerato están a punto de presentarse a la Ebau. Un estudio de la Fundación Universidad-Empresa señala que ocho de cada diez estudiantes escogen grado por ese motivo. Por su experiencia, ¿en qué medida se elige carrera por las salidas laborales? 

Sigue pasando. Desde los institutos y desde la universidad se está trabajando en trasladar que si eliges una titulación que no te gusta, va a ser un fracaso, siempre. Puede que el primer año, no, pero el segundo ya no aguantas. En esto trabaja el servicio de Orientación de Funge. Hay que tratar de cumplir unas metas, pero no en base a unos números que pueden cambiar de aquí a mañana. Hubo un ‘boom’ de ciertas carreras hace años que bajaron de golpe, es cíclico. Lo mejor que pueden hacer es estudiar algo que realmente les atraiga, que sea el trabajo de tu vida. El mercado laboral es muy cambiante, hay que formarse continuamente y las empresas buscan transversalidad. Está muy bien tener unos conocimientos específicos, pero hay que adaptarse al puesto. No puedes estudiar Enfermería porque tenga muchas salidas, si te pone nervioso ver sangre. Para ser un buen profesional te tiene que gustar lo que haces.

¿Los estudiantes recurren al departamento para encontrar un empleo o hacer prácticas, o viceversa?

Están acostumbrados a recibir toda la información. Siempre va a haber un profesor o un orientador que les explique, por ejemplo, una convocatoria, no la leen ellos. Cuando se van de Erasmus, el coordinador de prácticas de la facultad se reúne con los alumnos o lo explica individualmente. 

¿Quieren hacer prácticas en verano?

Muchos consideran que si han cumplido con su misión de estudiar durante el curso, pues quieren vacaciones. A veces sorprende que llamas a alguien y te dicen que se van de vacaciones. La mentalidad ha cambiado, pero no se puede generalizar porque hay de todo.

La inserción laboral en muchos perfiles está vinculada a la investigación, ¿se conocen las oportunidades investigadoras de Soria?

Los proyectos de investigación se vinculan a determinados departamentos y los que más se enteran son los alumnos que están en esos grados. Ahora tenemos proyectos europeos en Traducción e Interpretación, en la Escuela Universitaria de Ingeniería de la I Forestal, Agronómica y de la Bioenergía (Eifab), en Ciencias de la Salud y equipos de investigación en varias áreas. Hay proyectos de investigación vinculados a todas las titulaciones del Campus. También en algún momento ha habido que buscar fuera para estas iniciativas.

Además, el nuevo edificio I+D+i va a seguir como aulario, pero habrá una serie de laboratorios en los que ya se van a instalar empresas para potenciar la transferencia de conocimiento con la universidad. 

¿A qué sectores estarán vinculadas?

A la agroenergía, al estudio de las energías renovables y la bioenergía. Hay un laboratorio forestal que es enorme, que ahora es un aula espejo, pero habrá que darle contenido.

¿Son empresas de fuera o de Soria?

De momento, son empresas vinculadas con Soria. Pero se está trabajando en que, si hay capacidad y posibilidad, cualquier empresa puede establecer un convenio con la UVa.

¿Tendrán su espacio propio en ese edificio de I+D+i?

Sí. Tiene que haber un equipamiento del edificio y en cuanto se monte, ya pueden venir. 

Un estudio de la Universidad Católica de Ávila, publicado este jueves, señala que la inserción laboral de los egresados de la UVa es del 74,8%. ¿Y del Campus Duques de Soria?

Tenemos programas prácticas con los ayuntamientos de Soria, Valladolid... con diputaciones... con el ICE, con el Ecyl... y cada uno nos pide una valoración de la inserción a un mes de finalizar las prácticas y a los seis meses. La idea es realizar un estudio de toda la Universidad de Valladolid, un Observatorio de Empleo que nos facilite esos datos y nos ayude a adaptarnos al mercado cambiante. Está pendiente de aprobación pero esperemos que en breve se lleve adelante porque será de gran utilidad para la Universidad.

Después del parón del COVID, ¿cómo han cambiado los programas de prácticas y empleo?

Hubo que paralizar las prácticas. Poco a poco, cuando las empresas fueron teniendo recursos telemáticos para funcionar y si querían mantener las prácticas, se fueron reanudando. Hasta finales del verano, que ya había más presencialidad e implementación de medios, no hemos tenido una normalidad. Hemos reconocido que se puedan desarrollar prácticas de forma telemática. Antes nos parecía una aberración porque no había un tutor que estuviera cerca, pero hay muchas plataformas que nos acercan.

¿Casi todos los alumnos pasan por un periodo de prácticas?

Hay de todo. La mayoría sí pasa por programas de prácticas, pero hay otros optan por seguir estudiando, por prepararse oposiciones, hay quienes tienen empresas familiares, otros quieren emprender... la casuística es diversa, pero una inmensa mayoría quiere programas de prácticas. Más o menos, en la UVa estamos en unas 500 prácticas al año. 

¿Y en Soria?

No hay datos por campus de la UVa. El año pasado, el programa con el Ayuntamiento de Soria contó solo con titulaciones del Campus de Soria y ya había dificultades para cubrir las prácticas solo con gente de Soria. 

¿Cuáles son las expectativas de cara al curso 2021/2022?

Seguiremos con la misma dinámica. El convenio con el Ayuntamiento de Soria se firmará en junio. Tenemos el otro convenio pendiente que comentaba... Van saliendo. La Junta también está pendiente de convocar el programa ICE. Hubo un parón en 2020, se está reactivando y la tendencia es ir hacia arriba. Las empresas encaran nuevos procesos de digitalización y adaptabilidad telemática, y necesitan nuevos profesionales.

Hicimos un encuentro entre empresas y titulados en el espacio de coworking del Casco Viejo, como cierre del programa con el Ayuntamiento de Soria, en el que invitamos a los tutores y a los alumnos de prácticas para que cada uno contara su experiencia. A los titulados también se les impartió un pequeño taller de emprendimiento, aunque los seis de este programa terminaron contratados.

¿Favorece el hecho de que Soria sea un sitio pequeño en la colaboración con las empresas y en el seguimiento de las prácticas?

Sí, aunque tiene sus pros y sus contras. Por un lado, algunas empresas pequeñas tienen reticencias a coger gente en prácticas porque son celosos de sus números, así que meter a alguien de fuera por poco tiempo no les interesa. 

En general, como la formación es buena en la universidad, cuando llegan a las empresas y ven los conocimientos que tienen y que les pueden servir, están contentas. De hecho, la inserción es muy alta, lo que significa que funcionan. O reciben ofertas de esas mismas empresas o de otras que han conocido en ese tiempo.

La Fundación General de la Universidad de Valladolid (Funge) cumple 25 años, ¿cuál es el balance?

Se han hecho muchas cosas y hemos ido creciendo. Estamos contentos. Nuestro departamento ha sufrido una nueva reconversión y en enero abrimos una nueva bolsa de talento en la que a los titulados les damos ofertas de empleo y a las empresas, antes les ofrecíamos un servicio de difusión, ahora les damos la posibilidad de hacer nosotros todo el proceso: buscamos candidatos, hacemos la selección y los llevamos. Es para toda la Universidad de Valladolid. Los titulados tienen que registrarse en la página uvaempleo.com. Hay dos vías, las ofertas públicas, a las que pueden concurrir directamente, y otras de empresas que quieren que hagamos una preselección de candidatos. Es el sistema que se usa siempre para todo, pero el caso de la bolsa de talento también hay una modalidad en la que nosotros hacemos la selección de personal. El mayor problema que tenemos es la fuga de talentos. Más del 80% de los chicos que aprueban la Ebau en Soria se marchan fuera de Castilla y León, la mayoría trasladan el expediente a Madrid o Zaragoza.

¿Llegan ofertas del extranjero?

Hay muchos fisioterapeutas que se marchan a Francia. Hay consultoras que vienen a Soria a buscarlos directamente porque saben que la formación es buena. A veces ni siquiera les piden el idioma, dan allí unos cursos. Las condiciones son muy buenas. Hay un exalumno que tiene una clínica en Francia que también recurre a nosotros de vez en cuando.

¿Recurren exalumnos de otras titulaciones que estudiaron en Soria?

Sí, el otro día me llamó la directora de enfermería de un complejo residencial del País Vasco que estudió en Soria pidiendo personal. Hay exalumnos que vienen buscando profesionales a Soria porque creen que aquí la formación es buena. 

Está el proyecto ‘Alumni’ que nos ha encomendado la UVa. Antes había una asociación de antiguos alumnos que estaba para otras cosas. Queremos que ‘Alumni’ tenga una visión más global, que los titulados interactúen entre ellos, que no se pierda el contacto, y si alguien es responsable en una empresa y busca gente pues que venga a su universidad. 

Queremos que no se desvinculen entre ellos, que ‘Alumni UVa’ sirva como punto de referencia. Ahora han salido unas entrevistas ‘alumni’ para gente que esté en España o fuera en puestos de responsabilidad importantes, que han estudiado en la UVa, y son los primeros que pueden ayudar a otros alumnos de la UVa a encontrar un puesto de trabajo. ‘Alumni UVa’ será el paraguas de toda la unidad de empleo.