En verano de 2018, Carlos Pérez Salvachúa hacía la maleta y se marchaba a Australia.Tras varias temporadas en clubes como el Real Valladolid o el Real Madrid, aterrizaba en el Melbourne Victory como segundo entrenador. Con un equipo que este año no estaba cumpliendo las expectativas, la entidad decidía ponerle al mando de la plantilla. Ahora busca reactivar a un equipo que estaba hecho para luchar por el título de la A-League, la máxima categoría del fútbol australiano.
¿Cómo ha surgido esta oportunidad de ser el primer entrenador del equipo?
El equipo no estaba funcionando y el club decidió apostar por mí para intentar levantar la situación.
¿Va a ser complicado conseguir cambiar la dinámica?
Va a ser difícil por la cantidad de partidos que tenemos. Jugamos prácticamente cada tres días porque también estamos en la Champions de Asia. No tenemos casi entrenamiento para trabajar en nuestros errores.
¿Cuál es entonces la manera de ir cambiando las cosas?
Cambiamos todo sin poder entrenar. Intento aprovechar los partidos y las sesiones de recuperación y vídeo. Hablamos mucho para intentar ir inculcando la idea de juego que pretendo.
Debían estar en la parte alta y están en octava posición, ¿qué le ocurre al equipo?
Es una buena plantilla que ha tenido muchas lesiones. Además el club no estaba contento con la idea de juego.Estamos hablando del equipo más importante de Australia y querían un estilo mucho más ofensivo.
¿Su experiencia en España le hace ser una buena opción para conseguirlo ?
Es un equipo hecho para tener mucha llegada y concentrar mucho el juego en el ataque. Voy a intentar instaurar esa idea de juego. A corto plazo será difícil pero creo que los jugadores van a conseguir entenderlo.
¿Cuál es el objetivo deportivo a corto plazo?
Tenemos que entrar entre los seis mejores para poder luchar por el título en el playoff.Después queremos entrar en la fase de grupos de la Champions.
¿Cómo surge la oportunidad de trabajar en Australia?
Fue un poco de casualidad, no entraba en mis planes.El entrenador buscaba un ayudante español, se puso en contacto conmigo y me invitó a conocer el club. Además me vine con la familia.
¿Está contento con la decisión que tomó?
La decisión fue la correcta. La ciudad y el país son maravillosos. Echo de menos Madrid y Almazán, a la familia y amigos, pero estoy en un lugar maravilloso para vivir.
¿Qué le ha llamado la atención del fútbol australiano?
Es un juego con mucha transición. En general hay menos calidad que en España y eso hace que se pierdan muchos balones y haya muchos cambios de posesión. En cambio, los estadios son nuevos y muy grandes, las instalaciones son geniales.
¿Los entrenadores europeos son cada vez más en Australia como sucede en Asia?
Poco a poco, pero en Australia van por detrás de Asia.Aquí el fútbol es el cuarto deporte del país. Se necesita más tiempo para crecer.
¿A qué nivel se puede comparar con España?
La élite la podemos equiparar con la Segunda División. Hay buenos jugadores extranjeros en varios equipos y vamos creciendo.
¿Qué le falta al fútbol australiano para mejorar?
Es una liga cerrada estilo NBA, no hay descensos y debería cambiar. Además se debe mejorar el fútbol base.