"Hay perfiles profesionales que no se pueden cubrir"

Ana I. Pérez Marina
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Carlos Fernández Carriedo, consejero de Empleo de la Junta de Castilla y León, pone de relieve que hay que seguir trabajando para superar algunas asignaturas pendientes como la temporalidad en los nuevos puestos de trabajo

"Hay perfiles profesionales que no se pueden cubrir" - Foto: Eugenio Gutiérrez Martínez

La EPA del último trimestre de 2018 rebaja la tasa de paro al 4,35%, con 1.900 desempleados. En la Comunidad, después de que el desempleo llegara al 21% en 2013, hoy es del 11,2%, tres puntos por debajo de la media nacional. ¿Pueden mejorarse estas cifras?

Todavía tenemos que reconocer que no es suficiente, aunque sabemos que ha bajado el paro, todavía hay un camino por recorrer. Sería un error que ahora nos planteáramos que esto está conseguido y empezáramos una política distinta a lo que nos ha llevado hasta aquí. Creo que ahora hay varios riesgos como la inestabilidad política, que no crea empleo, y también sería un error  aplicar subidas de impuestos o retrocesos en el camino que hemos emprendido en el conjunto de España, de Castilla y León y de Soria para revertir la tasa de paro y, por tanto, hay que fomentar el empleo, crear las condiciones para que se genere trabajo, bajar impuestos y mejorar la formación. 

Tanto la patronal soriana como los sindicatos cuestionan los resultados de la EPA relativos a Soria, ya que consideran que el margen de error que sube cuanto más bajos son los valores que usa la muestra. ¿Qué valoración hace al respecto?

Estamos hablando de una encuesta que lleva a cabo el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la metodología es de ámbito nacional y permite comparar entre comunidades y provincias y, por tanto, hay que preguntar por la metodología al INE. Pero siempre ha sido la misma, para lo bueno y para lo malo.

¿Pero cree que es real que la tasa de paro en Soria es del 4,35%?

Tenemos la tranquilidad de que ni siquiera es la Junta de Castilla y León quien elabora estos datos. Lo hace el INE a nivel nacional y la metodología es la misma para toda España. No seré yo quien ponga en tela de juicio la metodología que aplica el INE.

La EPA deja también el siguiente resultado: cada nuevo ocupado requiere la firma de 38 contratos. Los sindicatos apuestan por ‘penalizar’ las cotizaciones a la Seguridad Social de los contratos temporales. ¿Qué propone para reducir la temporalidad?

Creo que hay un camino para mejorar la calidad del empleo, también sabiendo que en Castilla y León de cada cuatro empleos por cuenta ajena, asalariados, tres tienen un contrato indefinido. Es un ratio mejor que la media española, pero si todavía hay uno que tiene un empleo temporal hay que hacer un esfuerzo para seguir dando empleo y mejorar la calidad de los puestos de trabajo. Por tanto, cualquier iniciativa para fomentar, como hacemos en Castilla y León, la contratación indefinida es positiva.

La Comisión Operativa Autonómica de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social aprobó la realización de 43.843 inspecciones para 2019. ¿En qué se centrarán?

Básicamente, examinando la calidad en el empleo, para que no existan temporales o a tiempo parcial donde corresponda un empleo indefinido o a tiempo completo; también examinando la igualdad de oportunidades, para que no exista discriminación por ningún motivo en el ámbito laboral hacia las mujeres ni hacia ningún colectivo; y, finalmente, nos importa mucho el tema de los falsos autónomos, personas que deben tener un contrato por cuenta ajena y están dados de alta como autónomos. La Inspección de Trabajo y con la colaboración en Castilla y León lo tienen en su programación anual.

En su valoración de la última EPA, aseguró que la legislatura ha sido «muy intensa» en creación de puestos de trabajo. ¿En qué medida las políticas de la Junta han influido en la recuperación del empleo?

Es verdad que en cuatro años se han recuperado 70.000 puestos de trabajo en Castilla y León y más que las políticas de la Junta, yo hablaría de las políticas en el ámbito de los acuerdos de diálogo social que nos están permitiendo ayudar a la contratación por cuenta ajena, también a fomentar el autoempleo y el emprendimiento, y distintas iniciativas de crecimiento económico, de mejora de la cualificación y formación de los trabajadores. 

Aquí el diálogo social ha hecho un buen trabajo y está teniendo sus frutos, en términos de 70.000 nuevos empleos y también en la bajada de la tasa de paro, que en la anterior legislatura era del 20,3% en Castilla y León y ahora está en el 11,2% y, como ha dicho, en el caso de Soria está por debajo.

En Soria, la salida de trabajadores a otras provincias y también fuera del país es un goteo por la falta de oportunidades laborales. ¿Qué se puede hacer para retener trabajadores y, al mismo tiempo, poner freno a la despoblación?

Los últimos datos ya certifican que Castilla y León empieza a tener un saldo migratorio positivo, es decir, que empieza a venir más gente de la que se va. Esto no ocurría en nuestra Comunidad desde hace diez años y los últimos datos empiezan a poner de manifiesto que es así. En Soria, es verdad que hay un problema de natalidad muy importante, aunque también, de forma paradójica, vemos que algunas empresas empiezan a demandar algunos perfiles profesionales que ni siguiera se están pudiendo cubrir. Por tanto, es importante que para cubrir los puestos de trabajo tengamos la voluntad de poner en marcha iniciativas relativas a la vivienda y otras cuestiones que faciliten la residencia de personas en Soria. 

Es una ventaja el hecho de que la vivienda y el alquiler sean mucho más económicos en Soria que en otros sitios de España, es una oportunidad porque permitirá cubrir puestos de trabajo. Y el factor determinante es poner en valor el prestigio del mundo rural. Sería un error que en España siguiéramos pensando que vivir en el mundo rural tiene menos prestigio que vivir en el mundo urbano. Este es un elemento fundamental porque es imprescindible crear empleo, una fiscalidad favorable en los entornos rurales, que haya vivienda adecuada y, claro, también la sensibilidad hacia el hecho de que lo rural es un elemento de prestigio, de calidad de vida y de valores que tenemos que poner de manifiesto.

Ya son tres años del Plan de Dinamización Económica y Demográfica de Soria (Plan Soria), en el que también está implicada la Consejería de Empleo. Aunque es poco tiempo, a juzgar por los datos poblacionales, no está surtiendo mucho efecto. ¿Cómo puede reforzarse esa estrategia?

Se están creando puestos de trabajo, que es algo que se está demostrando que estamos haciendo. Se ha puesto en marcha este plan y desde Empleo hemos hecho una aportación que junto con la de la Diputación Provincial suman cuatro millones de euros. Se traducen en ayudas a la natalidad, vivienda... es una excelente ocasión porque otras provincias de España no tienen esos incentivos sociales y tendríamos también que comunicarlos e informar sobre ellos.

Aún así, ¿cómo se puede reforzar la estrategia? Aunque existen esos beneficios respecto a otras provincias, también puede entenderse como un parche para sostener lo que existe pero no para ir mayores.

Lógicamente, el Plan Soria incluye 80 millones en cuatro años y también es un elemento que está bajando esas cifras de paro. Creo que es positivo que fuera de Soria también se conocieran las ayudas, el nivel de paro que tiene Soria, puestos de trabajo que están ofertados que sería bueno que se cubrieran por personal suficientemente cualificado de otras provincias y también de fuera de Castilla y León. Esos incentivos a la natalidad y a la vivienda no siempre son conocidos por el conjunto de la sociedad y es un factor básico.

Lo que decíamos también antes sobre el reparto entre lo rural y lo urbano. Es una pena que en los ámbitos urbanos el paro sea más alto, el coste de la vivienda más caro, los costes de transporte muy relevantes... y, sin embargo, al final no estamos convenciendo a los ciudadanos de la importancia y los valores del mundo rural.

Entonces, hay que incidir en una campaña de difusión...

Claro, estoy convencido de que este modelo a nivel mundial donde la gente se concentra en grandísimas ciudades con costes ambientales, urbanísticos, de transporte... no es sostenible, pero lo que tenemos que hacer es acelerar el cambio que es imprescindible. No creo en un planeta de grandes ciudades, sino en un planeta donde la distribución de la población en el territorio garantice la vivienda asequible y un mecanismo de transporte que no supongan colapsos.

El año empezó con la aprobación de la subida del Salario Mínimo Interprofesional hasta los 900 euros. ¿Cómo influirá en el mercado laboral de Castilla y León?

Hubo un acuerdo entre empresarios y trabajadores para que el Salario Mínimo Interprofesional fuera de 850 euros. Siempre soy partidario de los acuerdos porque dan garantía de hacer compatible los crecimientos salariales con el aumento del empleo. Es muy importante que hagamos todos el esfuerzo de mejorar la productividad y el empleo, porque con más productividad y más empleo también van a subir las retribuciones y los salarios. También hay que reconocer que algunas personas tienen todavía unas retribuciones inferiores y anteriores a la crisis económica.

¿Cuáles son los motivos por los que la Junta rechazó los criterios del Gobierno para repartir fondos a planes de empleo juvenil?

Nos plantearon una nueva distribución de fondos, en la que se iba a valorar en menor medida a las comunidades autónomas con menos paro y que hubieran cumplido mejor en materia de políticas de empleo. De esta manera, iban a aumentar los fondos para las autonomías con más paro y que peor gestión hicieron de esos fondos. Esto perjudica a Castilla y León, que tiene menos paro y una muy buena gestión de los fondos públicos para políticas de empleo. 

También puso de manifiesto que la Junta trabaja para dar «máxima prioridad» al ámbito del empleo y al Diálogo Social dentro de la prórroga presupuestaria. ¿Cuáles son los objetivos?

La prueba es que pudimos firmar acuerdos de diálogo social con sindicatos y empresarios el día 30 de enero. El objetivo básico es seguir creando empleo, dirigido especialmente a un colectivo que tiene que ser el más beneficiado de la recuperación que son los jóvenes. Todavía la tasa de paro juvenil es muy alta y tenemos que hacer un esfuerzo tanto en empleo local de los jóvenes, como fomentar el autoempleo y la contratación juvenil por cuenta ajena, y una mejora de la cualificación y de la formación. En esos acuerdos, por ejemplo, se refuerza la formación en alternancia.