La incertidumbre continua en Aleia, hoy el administrador concursal se ha reunido con los trabajadores para informarles de la situación. Según los sindicatos la licencia de rosas por doce años que posee la empresa ha sido tan solo la excusa del grupo de Botín para hacerse a un lado del proceso, si el juzgado de lo mercantil no aprueba su salida tendrían que pagar un millón de euros como penalización. Hoy el administrador concursal ha presentado un escrito ante el juzgado alegando que todo el proceso estaba correcto y justificando así que no se entiende la retirada de la oferta. Desde Comisiones Obreras ven algo oscuro en este proceso, llegan a pensar podría tratarse de una estrategia para abaratar el coste de la venta de la unidad productiva. Si Botín quedase fuera, tendrían que comenzar de nuevo el proceso. Aunque ya tengan parte avanzada sería volver a empezar de nuevo. Al menos las dos ofertas en firme que hubo en el anterior proceso dan algo de tranquilidad según UGT. Aunque todo apuntaba a una rápida resolución del proceso la situación de Aleia se está complicando más de lo previsto y los trabajadores siguen a expensas de saber cual será su futuro