El Campus Duques de Soria de la Universidad de Valladolid ha arrancado hoy el curso 2020/21. Una primera jornada de presentaciones marcada por las medida de prevención de la Covid-19. Un inicio ilusionante pero a la vez marcado por la incertidumbre de lo que pueda pasar. La distancia de seguridad ha obligado a reducir la presencialidad en el campus y por eso algunas asignaturas se van a impartir de manera bimodal.

"Ha sido un poco raro todo con esto de las mascarillas, pero bien", aseguraba una joven antes de entrar a su primera clase esta mañana. Un estudiante de Traducción indicaba que "estoy haciendo segundo así que no me pilla más de nuevo aunque hay intertidumbre de cómo nos debemos comportar por aquí". Para una alumna de ADE "es una sensación super rara porque no estamos acostumbrados a llevar la mascarilla".

Más de 1.700 universitarios han iniciado el nuevo curso en el Campus Duques de Soria.

Ilusión e incertidumbre en el inicio de curso en el campus

Pero es obligatoria en todo el recinto, ahora dividido por carriles para ordenar el tránsito de los alumnos. "Está con flechas en el suelo bastante bien señalizado", explicaba otro joven.

No todos los matriculados pueden ir a clase al mismo tiempo. La distancia interpersonal reduce la ratio a 28 alumnos por aula y por eso algunas asignaturas se van a impartir de forma bimodal. "Tienen que visualizar la sesión en su casa, y el siguiente día puede venir de forma presencial", comenta la profesora Carolina Hamadi, de la Facultad de Educación.

Algunos al aula 'N1', la más grande del campus con 110 plazas que en lugar de pizarra cuenta con un gran pantalla. Se ubica en el nuevo edificio I+D que dispone de otro gran espacio para 80 alumnos, además de otras aulas y laboratorios para prácticas.

Así comienza el primer curso de la ‘nueva normalidad’ en un campus que eleva el número de docentes a 250.