María José Jiménez, alcaldesa de Garray, informaba está mañana del interés que suscitan los invernaderos que surge tras darse a conocer públicamente que la empresa ha entrado en concurso de acreedores. Aleia llega a esta situación a pesar de haber recibido más de 6 millones de euros de subvenciones públicas. Ahora esas empresas que muestran interés por la factoría no aseguran dar continuidad al cultivo de rosas sino que sus invernaderos podrían dedicarse a cultivos alternativos.
Benito Serrano por su parte considera que el recurso interpuesto por ASDEN, que paraliza el desarrollo del Parque Empresarial del Medio Ambiente, ha perjudicado también a la factoría. Asegura que el que Aleia no haya podido beneficiarse de los servicios de GESTAMP ha perjudicado económicamente a la factoría encareciendo sus gastos mensuales