El Boletín Oficial del Estado(BOE) publicó el pasado 30 de diciembre el Real Decreto Ley 32/2021 que recoge el acuerdo alcanzado entre el Gobierno, las organizaciones sindicales CC.OO. y UGT y las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME para reformar estructuralmente el mercado laboral, dos días después de que el Consejo de Ministros diera el visto bueno. La temporalidad se situará en el entorno de los estándares europeos y la negociación recuperará su papel central en las relaciones laborales. El 31 de diciembre entraron en vigor las medidas urgentes, excepto algunos supuestos sobre temporalidad que las empresas deberán aplicar en un plazo de tres a seis meses. Pero la normativa tendrá que pasar por una compleja tramitación parlamentaria, el primer paso será la convalidación del decreto ley de la reforma laboral por el Congreso de los Diputados. Tendrá que ser antes del 7 de febrero.
«Resulta de una complejidad enorme valorar en este momento la repercusión que tendrá la reforma laboral en Soria, por cuanto la misma incluye medidas diversas que afectan a ámbitos muy distintos, como el de la contratación o el de la negociación colectiva, entre otros», reconocen desde la Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES). Además, el país se encuentra «en un contexto de elevadas incertidumbres -la sexta ola ómicron, la subida de materias primas, de la luz, inflación…- que hacen muy difícil prever comportamientos empresariales, así como tendencias económicas a medio plazo».
En relación a si la reforma laboral disminuirá el desempleo en Soria, teniendo en cuenta que los niveles son muy bajos (tasa de 6,16) en comparación con el conjunto de España (tasa del 14,57, según la última EPA), desde la patronal no se piensa que la situación vaya a cambiar. Ni tampoco que vaya a haber incrementos salariales por cambios del convenio colectivo aplicable (del colectivo de empresa al sectorial), porque «la mayor parte de empresas se rigen por el convenio sectorial provincial. Muy pocas tienen convenio propio y las que lo tienen, respetan las condiciones del convenio provincial».
contratos. El cambio «más disruptivo» en la reforma laboral, según FOES, se produce en la contratación, «el elemento que más dificultad va a generar en las empresas hasta que nos adaptemos a los cambios». Sobre si afectará la reforma a la temporalidad de los contratos, desde FOES apuntan que «es muy difícil valorarlo en este momento por cuanto existe una vacatio legis» y esa medida «no entrará en vigor hasta 31 de marzo de 2022». «Por ello, para hacer una valoración más fina, mejor ir viendo cómo van reaccionando las empresas en este periodo de tres meses que queda por delante», insisten.
Además, hacen referencia a que esta cuestión «dependerá de la recuperación de España y de la coyuntura económica, que serán factores relevantes que diriman en gran medida y en los próximos meses, si las empresas se decantan por convertir los contratos temporales en indefinidos o por reducir la contratación». La patronal soriana recalca que, aunque la reforma ha sido negociada con CEOE, CEPYME y sindicatos en la Mesa del Diálogo Social y aprobada en Consejo de Ministros, «puede tener cambios en su tramitación parlamentaria». «Cambiar algo tan aparentemente intrascendente como una coma, podría implicar interpretaciones y afecciones muy diversas», advierten.
Desde la Cámara de Comercio de Soria prefieren no valorar la reforma hasta que no entre en vigor, pero sí destacan el «consenso» y confían que aporte «estabilidad» a las empresas en en una situación tan complicada, por la pandemia y los altos precios de la energía y las materias primas.
avances. Desde los sindicatos CC.OO. y UGTen Soria enfatizan en el fin de la temporalidad, que supone en torno al 90 por ciento de los contratos firmados al mes en la provincia y que vienen advirtiendo de ello desde que comenzó a aplicarse la anterior y polémica reforma del PP en 2012 por el «abuso» que estaban haciendo de este tipo de contratos muchas empresas. Afectan a muchos sectores en Soria, pero especialmente al sector servicios (hostelería y comercio, sobre todo) y a la industria. También hay una alta temporalidad en Soria y en el conjunto del país en las administraciones públicas, con uno de cada tres empleados, por lo que el Gobierno ya ha llegado a un acuerdo para su «estabilización».
Javier Moreno, secretario general de CC.OO., incide en que esta medida de convertir contratos temporales en indefinidos «beneficiará» a los colectivos con contratos más precarios, como el juvenil, el femenino y el de inmigrantes, «que podrán tener contratos más estables». Igualmente, arremete contra la temporalidad «no deseada», que no es por conciliar, ya que «son trabajadores que no quieren esos tipos de contratos». Con la reforma «se dará estabilidad a los trabajadores y podrán plantearse un proyecto vital en torno a un empleo de calidad y estable». La mayoría de contratos serán ahora indefinidos y los temporales corresponderán solo a casos excepcionales y tendrán que estar debidamente justificados, como cuando una empresa tenga previstos picos de producción o en determinados sectores de actividad. Además, se limita la duración de estas colocaciones.
La medida respecto a los convenios colectivos afectará a las subcontratas y contratas, ya que se dará prioridad a la aplicación del convenio del sector frente al de las empresas, lo que beneficiará, por ejemplo, a trabajadores de empresas multiservicios y de la construcción. Javier Moreno destaca, igualmente, que se «fortalece» la negociación colectiva. La cláusula de retroactividad permitirá que se mantengan convenios que dejaban de ser de obligado cumplimiento y los trabajadores no quedarán desprotegidos, «no se perderán derechos adquiridos». «Ha habido denuncias en Soria y los juzgados han dado la razón a los trabajadores», añade. En contratos de formación, que también se mejoran en una clara apuesta por la FP Dual, Moreno subraya que se prepare a trabajadores en vez de que hagan meras sustituciones de la plantilla. «Se forma a trabajadores, se les da protección y se regulan los contratos en prácticas», subraya.
Azucena Pérez, delegada territorial de UGT en Soria, cree que la reforma aportará «estabilidad» al mercado laboral y «no se utilizarán los contratos temporales para cubrir puestos estructurales o de plantilla». «Las empresas tendrán que ajustarse más a las previsiones, porque en los últimos años se habían relajado en este sentido y se hacía la vista gorda», indica.
En cuanto a los ERTE, los de fuerza mayor «son ya muy pocos» y se piden más ETOP. Sobre los convenios colectivos, tendrán prioridad los sectoriales o nacionales frente a los de empresa, argumenta que en Soria no hay muchos porque son más provinciales, sectoriales o de grupos. Afectaría más, explica la responsable sindicalista, en cuanto a los descuelgues, «porque tendrían que pasar más trámites y justificarlo mejor».