Pelota a mano con ADN pinariego

Sergio Recio
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El Club Pelota de Urbión consigue un hito y logra subir a la máxima categoría de la pelota a mano

Pelota a mano con ADN pinariego - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez.

Hace tres años el Club Pelota Urbión se quedaba a las puertas de lograr el ascenso a División de Honor, la máxima categoría nacional de la pelota a mano. Desde ese momento la entidad pinariega lo tenía claro, para crecer debían conseguir esa subida de categoría, era algo vital para su supervivencia. Ha tenido que ser en 2019 cuando se consiga. Nadie en Pinares olvidará el pasado fin de semana cuando lograron imponerse a Paz Ziganda, cuando a su vez garantizaron el ascenso al ganar la otra serie el Oberena, un filial, y cuando se dieron el gustazo de pasarles por encima en una final para coronar el sueño.

anomalía. «Un cambio o desviación respecto de lo que es normal, regular, natural o previsible», esta es la definición de anomalía y a su vez la mejor para dar a entender lo que el Club Pelota Urbión es para este deporte. Dominado por el País Vasco, Navarra y La Rioja, la pelota a mano cuenta con un pequeño territorio que quiere poner en jaque a los más grandes de este deporte, «la gente que no nos conoce nos pregunta extrañada que por qué hay tantos deportistas en Pinares que se dedican a este deporte», comenta Emilio Cabrerizo, uno de los integrantes de este histórico equipo y a su vez presidente del club. «En realidad es muy sencillo, está arraigado en nuestra tierra, lo llevamos en la sangre, me gusta definirlo como un oasis fuera del Norte de España». 

Pero no vale solo con eso, para garantizar su supervivencia hace falta futuro y ese pasa por los más pequeños, «cuando comenzamos con la escuela teníamos dos claros objetivos, que conocieran este deporte desde edades tempranas y conseguir que puedan jugar y competir siempre para nuestro club».  Ahora mismo suman unos 60 pelotaris en total pero cada año es más complicado conseguir un número importante, «cada vez es más difícil conseguir niños». En este caso vienen de Covaleda, Duruelo de la Sierra, Vinuesa y Molinos, «un punto de encuentro para jugar a la pelota a mano y ayudar a combatir este fenómeno de la despoblación».

Este problema de la España vaciada toca muy cerca al Club Pelota Urbión. Han defendido la causa en múltiples ocasiones y siempre llevan la bandera de Soria ¡Ya! a cada polideportivo que compiten, «el futuro de la pelota va unido en paralelo al futuro de los pueblos. Si no hay niños no puede haber pelotaris y evidentemente acabará no habiendo nada». La solución para Cabrerizo es clara, «todo pasa por que haya más escuelas y más zonas donde se pueda jugar a la pelota». Golmayo creaba recientemente una escuela para practicar este deporte y ahora lo necesario sería que lo hiciese Soria capital, «si conseguimos que este deporte se identifique con nuestra provincia, será más fácil que los niños lo practique y a su vez será un motivo más para quedarse».

supervivencia. Aunque pueda parecer todo lo contrario, el ascenso de categoría será un alivio económico para el Club Pelota Urbión, «en División de Honor las ayudas económicas son más altas y es más sencillo conseguir más y mejores patrocinadores». Mejorar en esta faceta hará que puedan afrontar con más tranquilidad la competición, «somos un club pequeño, con recursos limitados, siempre ajustamos cada euro y miramos la forma de reducir los gastos lo máximo posible».

Esta manera de afrontar la competición hace que para ser mejores tengan que ser ingeniosos. Es el caso de esta temporada ha sido determinante la adquisición de dos jugadores guipuzcoanos, Endika Uriondo yXavi Zubiria, «no hay casi jugadores de nivel en Soria, pero a su vez no tenemos capacidad para fichar a base de talonario. En el caso de estos dos jugadores, los conocíamos de los torneos de verano, somos amigos y por eso vienen aquí a competir». Porque hay que darse cuenta que para adquirir jugadores del norte «hay que garantizarles jugar todos los días, cosas que allí pueden hacer. A esto hay que sumar que son 600 kilómetros desde Guipúzcoa hasta Soria, por lo que hace más complicado que puedan venir».

Han sido el empujón que el club necesitaba para ya formar parte de los mejores de España, «nos hemos quitado un peso de encima y  esto garantiza nuestra supervivencia». Ahora van con todo a la División de Honor, «somos muy ambiciosos, competiremos cada partido», y lo que para Emilio Cabrerizo es más importante, «nuestra tierra será testigo de partidos con los mejores pelotaris de España».