La complejidad que supone contactar y poner de acuerdo al cerca de un centenar de propietarios de los terrenos por los que está previsto que pasen las nuevas sendas y a la espera de encontrar la financiación suficiente para materializar el proyecto a corto plazo han llevado al Ayuntamiento de Soria a ‘aparcar’, de momento, una nueva actuación en las márgenes del Duero a su paso por la capital soriana, la comprendida entre la ermita de San Saturio y Los Rábanos a través de la orilla derecha. 

Esta tercera fase de la adecuación de la ribera del Duero para disfrute ciudadano, reconocen desde el propio Consistorio soriano, no está actualmente entre las prioridades municipales a la espera de poder hallar una alternativa que permita la reactivación de la iniciativa que ya obtuvo el ‘plácet’ del Ministerio para la transición ecológica y el reto demográfico en octubre de 2016.

El Ayuntamiento de Soria reconoce que, desde entonces, el proyecto de la nueva depuradora que dará servicio a la ciudad ha ‘monopolizado’ en gran medida los proyectos medioambientales y, aunque no lo descarta en absoluto, a la espera de que puedan resolverse los dos asuntos principales que han llevado a su paralización temporal (la búsqueda de financiación y las negociaciones con los propietarios del suelo por los que discurrirían las futuras sendas) no se auguran avances por el momento. 

por la senda actual. El trazado de la III fase de adecuación de las márgenes del Duero aprovecharía en gran medida el camino actual que comunica la ribera del Duero soriana con la perteneciente al municipio colindante de Los Rábanos. En total, 8,2 kilómetros que discurrirían en un 87% por terrenos enclavados en el término municipal de la capital y sólo 1.000 metros en el de Los Rábanos. 

Distribuido en tres tramos: Soria-Valhondo (3,8 kilómetros); de este paraje al de Dos Ramas (2,25 kilómetros) y de ésta hasta la localidad de Los Rábanos (2,10 metros), el proyecto inicial ya contemplaba un ramal adicional que conectaría las márgenes del Duero con el sendero GR 14 y la vía verde a través del río Golmayo. Precisamente en la desembocadura de este afluente del Duero estaba proyectado construir uno de los dos miradores dedicados a la observación de aves que se perfilaron en el proyecto original (el otro estaba previsto en la zona de Dos Ramas).

Al igual que en las actuaciones precedentes en la ribera de las márgenes del Duero, las fases I y II que contaron con el 70% de financiación europea (el resto, a partes iguales, fue sufragado por la Junta de Castilla y León y el propio Ayuntamiento de Soria), este proyecto municipal también incluía la construcción de dos embarcaderos, en este caso, de cara a promocionar la realización de deportes náuticos. Uno de ellos estaba previsto construirse en Valhondo y otro, igualmente, en la zona de Dos Ramas. 

La planificación también contemplaba la creación de una pasarela con mirador de 150 metros de longitud en el paraje de Valhondo, así como la adecuación del acceso a la cueva de la Zampoña y la instalación de tres zonas de estancia para disfrute de los paseantes. 

Desde el Consistorio se estima que el proyecto de la depuradora no afectaría, en principio, al trazado inicial de esta nueva ronda peatonal del río a su paso por la capital. 

Con esta actuación se pretendía dar continuidad a la adecuación de las márgenes del Duero a su paso por la capital que se inició en 2003 y que, en diferentes fases de adecuación y distintos años de realización, permitió recuperar la ribera del río desde San Saturio hasta el término municipal de Garray a través de una nueva red de sendas, pasarelas y zonas de esparcimiento y disfrute de su entorno natural, así como la restauración de algunos bienes patrimoniales como la antigua puerta del Postiguillo, entre otras actuaciones. Casi de forma inmediata desde su puesta en marcha, estas nuevas sendas disfrutaron de gran éxito y, a día de hoy, son muy transitadas entre paseantes y deportistas.