De cada 100 alumnos universitarios de Castilla y León, solo diez dejarán el sistema educativo antes de finalizar sus estudios sin lograr ningún título, y otros diez se cambiarán a otro grado diferente al que iniciaron su andadura estudiantil. O lo que es lo mismo, el 19,6 por ciento de los castellanos y leoneses abandonan sus estudios universitarios antes de finalizarlos, lo que supone la ratio más baja de España, donde la tasa crece hasta el 26,5%, según el estudio U-Ranking 2019 de la Fundación BBVA e Ivie presentado ayer.

Por universidades, la de León es la que presenta la menor tasa del sistema educativo, apenas el 6% lo deja antes de obtener algún graduado. Los cuatro centros públicos de la Comunidad están entre los 20 primeros con menor ratio de abandono, siguiendo a la universidad leonesa la de Salamanca (8,7%), Burgos (9,7%) y Valladolid (10,5%). Un orden que se repite a la hora de cambiarse de un grado al otro -León (5,2%), Salamanca (8,1%), Burgos (13,9%) y Valladolid (15,5%)-.

Por ramas, los estudios de la Salud son los que menor movimiento registran, y solo el 9,6 por ciento dejó la universidad o se cambió de grado, seguida por las Ciencias Sociales y Jurídicas, 18,4 por ciento; Artes y Humanidades, 20,8 por ciento; Ciencias, 24,25 por ciento; e Ingeniería y arquitectura, con una ratio del 25,9 por ciento. Para Joaquín Aldas, del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas, que ha elaborado el estudio, «las tasas de abandono son más elevadas en las universidades presenciales públicas que en las privadas por la renta de las familias» y porque, en su opinión, en las privadas «se hace un mejor acompañamiento al estudiante», ya que es que genera «los ingresos de la institución».