En busca de la dieta perfecta

SPC
-

Un equipo de científicos recomienda duplicar el consumo de nueces, frutas y legumbres de forma habitual y reducir la ingesta de carne para prevenir 11 millones de muertes prematuras

Muchos son los que buscan las dietas milagro o perfectas y pocos son los que consiguen perder peso con una de ellas. Sin embargo, una comisión internacional de científicos formada por 37 especialistas de 16 países asegura haber ideado lo que considera un régimen ideal, tanto para la salud del ser humano como del planeta. Según las investigaciones, es necesario duplicar el consumo de nueces, frutas, verduras y legumbres, y reducir a la mitad la ingesta de carne y azúcar. 

Si el mundo siguiera esta dieta, que estos expertos han bautizado como Salud planetaria, se podrían prevenir más de 11 millones de muertes prematuras cada año, mientras que las emisiones de gases de efecto invernadero se reducirían y se preservaría más tierra, agua y biodiversidad. 

«La comida que comemos y cómo la producimos determina la salud de las personas y el planeta, y, actualmente, estamos cometiendo un grave error», explica Tim Lang, profesor de la Universidad de Londres y uno de los líderes principales del estudio. 

Los especialistas consideran que alimentar a una población creciente de 10.000 millones de personas para 2050 con una dieta saludable y sostenible será imposible sin transformar los hábitos alimenticios, mejorar la producción de alimentos y reducir el desperdicio actual. «Necesitamos una revisión significativa, cambiando el sistema alimentario global a un nivel que no se ha visto antes», apostilla Lang. 

Los primeros objetivos científicos para esta dieta pasan por un sistema de producción sostenible que equilibran los beneficios de macronutrientes y la toma de calorías. Basada en una ingesta de 2.500 kilocalorías al día, este régimen recomienda un consumo variado de diferentes tipos de alimentos. 

Así, diariamente creen que se deberían consumir 1.324 gramos diarios de leche entera o derivados (250 gramos), arroz, trigo, maíz y otros cereales (232), frutas (200), verduras (300), patatas y yuca (50), todo tipo de azúcar (31), pescado (28), huevos (13), grasas añadidas (52), legumbres (75), frutos secos (50), pollo y otras aves (29), y ternera, cordero y cerdo (14). 

hambre en el mundo. Los investigadores reconocen que su objetivo es «muy ambicioso», sobre todo porque «existe una gran desigualdad mundial en el acceso a los alimentos». Según su propuesta, y centrándose en regiones individuales, los habitantes de América del Norte, por ejemplo, deberían reducir su consumo de carne roja hasta 6,5 veces, mientras que en el sur de Asia se ingiere solo la mitad de la cantidad sugerida por la dieta de la Salud Planetaria. 

«Más de 800 millones de personas tienen alimentos insuficientes, mientras que muchos más consumen una dieta poco saludable que contribuye a la muerte prematura y la enfermedad. Si no podemos hacerlo, es mejor tratar de acercarnos lo más que podamos», concluye Walter Willett, de la Universidad de Harvard (Estados Unidos). 

En respuesta a este informe, el sector cárnico español señala que el consumo de carnes en territorio nacional «está dentro de las pautas marcadas por los organismos internacionales de salud como la OMS», por lo que indican que las recomendaciones del documento nutricional «están en línea con el consumo moderado que actualmente se realiza». 

En el apartado medioambiental, el estudio recomienda a nivel mundial apostar por una ganadera más sostenible, ámbito en el que destaca que «España y la UE son un referente por su trabajo en la sostenibilidad de sus producciones mejorando los procesos, las instalaciones y la gestión de residuos medioambientales».