Igea insta a retrasar la segunda dosis para cubrir más gente

SPC
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El vicepresidente asegura que el crecimiento «discreto y continuo» se ha visto frenado y explica que la velocidad de administrar la primera vacuna es «esencial» para frenar la incidencia

Momento de la vacunación ayer de la consejera de Sanidad, Verónica Casado. - Foto: Wellington Dos Santos Pereira

La cuarta ola va camino de quedarse en una marejadilla en Castilla y León, que ya descarta una explosión de casos post Semana Santa como la ocurrida en el mes de enero tras las fiestas navideñas. Una vez pasados catorce días desde la Semana de Pasión, y con cifras de contagios e incidencia contenidos, el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, aseguró ayer que ya están seguros de que no habrá un crecimiento de la incidencia de la covid-19 como la de las pasadas Navidades. «El crecimiento discreto y continuo se ha visto frenado y ha iniciado un leve descenso», explicó el número dos del Ejecutivo autonómico, que aprovechó su intervención en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno para explicar que la Junta es partidaria de alargar la administración de las segundas dosis de las vacunas para llegar con la primera al mayor número de población y en el menor tiempo posible. De hecho, esta postura la defendióCastilla y León en la reunión del Interterritorial de? Salud al considerar que la velocidad en la vacunación con la primera dosis es «esencial» para cortar las cadenas de transmisión del virus ya que ofrece una protección muy importante. 

En la comparecencia, Igea detalló que ya han pasado 14 días del inicio de la Semana Santa, por lo que se atraviesa un «momento crítico» para analizar la evolución de la cuarta ola, e insistió en que se debe seguir con las medidas de control. Asimismo, indicó que se ha producido un descenso en los enfermos hospitalizados, tanto en las plantas como en las UCI, donde reconoció que se produce un «ligero repunte», aunque se mantiene la ocupación por debajo de las cifras más bajas de la segunda a la tercera ola. De esta forma, Francisco Igea evitó enviar el mensaje de que hay que confiarse, pero sí insistió en que los datos permiten «mirar con cierto optimismo» los próximos días.

Inmunización antes de julio

En lo que respecta a la campaña de vacunación, el vicepresidente y portavoz se mostró  confiado de que se logrará la inmunización suficiente de población antes de que acabe julio si se mantiene el ritmo de suministro de las vacunas contra la covid-19, tanto por el aumento de las dosis disponibles de Pfizer, como por las de Moderna, AstraZeneca y Janssen. Igea destacó que uno de cada cuatro castellanos y leoneses, el 24,5 por ciento –más de 755.000–, ya ha recibido una dosis de las vacunas y el 11,6 por ciento –más de 242.000– ha completado ya la pauta vacunal.

«La campaña está siendo un éxito», dijo el número dos de la Junta, quien aseguró que esto es uno de los aspectos que ha influido «más decididamente» en la evolución de esta cuarta ola, que recordó no esté teniendo la pendiente que tuvo la posterior a Navidad. Además, aseguró que creen que está contribuyendo también a frenar la mortalidad, que recordó está en unos niveles «muy bajos». Por ello, aseguró que en la Junta están «muy satisfechos» con la campaña de vacunación e insistió en que ha sido un «éxito» y un modelo para España y Europa, porque no hay ningún territorio como Soria con tantas personas con dos dosis administradas, ni siquiera ningún país, excepto Reino Unido, que ha priorizado la inmunización con la primera.

Por ello, Francisco Igea aseguró que no tendría sentido modificar «la mejor campaña de España» por su cobertura de personas, si bien abrió la puerta a incrementar los avisos a la población. Aunque insistió en no variar la estrategia «más exitosa de Europa», admitió la posibilidad de «corregir errores» y de intentar llegar «todo lo lejos posible», ante las críticas por la difusión de los llamamientos a través de redes sociales. Además, garantizó que habrá una repesca para quienes no hayan acudido a las vacunaciones masivas ya realizadas.

Fin del estado de alarma

Por último, Igea aprovechó para reiterar la exigencia regional al Gobierno central para que cumpla con su palabra de reformar la ley de Sanidad para que las comunidades tengan una herramienta legal para aplicar las restricciones y, si no fuera así, que mantenga el estado de alarma, cuya vigencia concluye el 9 de mayo. El vicepresidente y portavoz se refirió así a la posición de la Junta sobre el fin del estado de alarma, e indicó que «cualquiera de las dos opciones sirve», al tiempo que centró la critica en el Gobierno y en su presidente por lo que calificó de «subcontrata» de la gestión de la pandemia a las comunidades, de manera que estimó que no les preocupa pero sí a quien tiene la subcontrata, como la Junta de Castilla y León.

También se mostró convencido de que no será suficiente con la aplicación de las medidas bajo la cobertura del Consejo Interterritorial de Salud y subrayó que todo el mundo sabe y también el presidente que la restricción de derechos fundamentales no está permitida el derecho ordinario y está sujeta a los tribunales. Por ello, insistió en que el Gobierno cumpla su palabra de modificar la ley de Sanidad y añadió que si entiende que no es necesario el estado de alarma no se sabe porque seguimos con él.