El Real Madrid ha comenzado este jueves con una fácil victoria (98-75) su serie de cuartos de final ante el BAXI Manresa en los playoff de la Liga Endesa, merced a una gran actuación coral y con el ala-pívot esloveno Anthony Randolph sobresaliendo por sus 15 puntos.

Así, los pupilos de Pablo Laso mostraron en el WiZink Center una versión muy firme para iniciar la defensa de su título del 2018. En caso de ganar el próximo domingo (21,30 horas) en el pabellón Nou Congost, los merengues cerrarían por la vía rápida este cruce y amasarían aún más moral de cara a las semifinales.

El triunfo de este jueves no peligró en ningún momento, firmando un parcial de 17-3 al inicio, pasando así del 0-4 al 17-7. Anthony Randolph había empezado a carburar y bien que se aprovechó de ello Facundo Campazzo, para desplegar su habitual menú de asistencias. Pero el base argentino no solo encontraba a Randolph, sino que además veía con facilidad bajo el aro a Walter Tavares. Entre ellos tres se encargaron de ir abriendo distancias, mientras que en el Manresa tan solo respondía el pívot haitiano Cady Lalanne en las tareas anotadoras.

Con el rodillo sacado, Laso se permitía, incluso, el lujo de dosificar a su plantilla; fruto de ello, el escolta francés Fabien Causeur ni participó en los primeros 20 minutos. Tampoco se quitó el chándal Felipe Reyes, que parece haber solucionado sus desavenencias con Laso tras la Final Four de la Euroliga. El pívot cordobés sí entró en acción para la segunda mitad de un encuentro plácido para él y su compañeros, tal y como expresaba el marcador al descanso (53-37).

Con Tomislav Zubcic apareciendo de manera intermitente, Lalanne no se bastaba para hacer frente a unos adversarios en plena racha positiva. Así, la renta madridista aumentó hasta moverse en un +20 (78-58) que servía de cerrojo ante cualquier conato de réplica manresana. El último cuarto se pasó en un suspiro, con Laso manejando el fondo de armario que tiene su plantel. El playoff todavía augura muchas batallas de órdago y es casi una bendición, para sus intereses, que haya citas relajadas como la de este encuentro; por contra, el Manresa tendrá que cambiar radicalmente de cara si quiere seguir vivo.

El Tecnyconta acalla al Buesa Arena

Mal inicio del Kirolbet Baskonia frente al Tecnyconta Zaragoza (81-91) en el inicio del playoff de cuartos de final en la Liga Endesa, merced a otra actuación destacada del alero nigeriano Stan Okoye y dejando así contra las cuerdas al equipo vitoriano.

En una eliminatoria que se disputa al mejor de tres partidos, el Baskonia fiaba su suerte al fortín del Fernando Buesa Arena. Pero los pupilos de Porfi Fisac salieron muy inspirados y marcaron las distancias desde el primer segundo de juego.

El Tecnyconta comenzó este duelo con un parcial de 2-10 en poco más de dos minutos. Entonces aparecieron el pívot francés Vincent Poirier y el base uruguayo Jayson Granger, manteniendo a flote a un equipo vasco sin chispa y agobiado por sus fallos desde la línea de tres puntos. Todo lo contrario sucedía en el bando zaragozano, pues su lanzamiento más allá de los 6,75 metros iba viento en popa.

Al regreso de los vestuarios (30-54), la tendencia amagó con cambiar, aunque resultó ser un espejismo. El cuadro alavés se acercó tímidamente en el marcador (47-55) pero el equipo rival no se amilanó y gestionó bastante bien su ventaja.

La afición del Buesa Arena, incrédula por el poco ímpetu de sus jugadores, ni siquiera alentó como es costumbre y eligió el silencio en lugar de la reprimenda. Puramente testimonial fue el cuarto periodo, con parcial acumulado de 28-19, en un partido gris del conjunto que en teoría llegaba al playoff como favorito. Su condición de tercer clasificado en la liga regular invitaba al optimismo para el Baskonia, que ahora sin embargo pondrá en juego todo su futuro el próximo domingo (12,30 horas) sobre la cancha del Pabellón Príncipe Felipe.