Tras el empate de ayer, los jugadores del Numancia han podido disfrutar hoy de una sesión de entrenamiento diferente. Para romper con la dureza y a veces tediosa carga de trabajo típica de estas fechas, los responsables técnicos han querido hacer algo distinto sin descuidar la puesta a punto. Esta vez la actividad elegida ha sido el pádel, una disciplina muy diferente al fútbol pero a la vez atractiva. No es la primera vez que ocurre algo parecido. En su día el entonces preparador Jagoba Arrasate soprendió a los suyos con una sesión con piraguas en el Duero que fue bien acogida por la plantilla.