La actualidad laboral soriana está escrita en las últimas semanas por el futuro inmediato de Ondara (Garray). La firma ha anunciado el despido de 151 trabajadores, dos tercios de su plantilla actual, que acumula un Expediente de Regulación de Empleo (ERTE) hasta el próximo 31 de diciembre. La negociación con las organizaciones sindicales ha arrancado, pero sin avances en su posición por parte de la empresa norteamericana, que alega que no hay trabajo para tantos empleados porque, por ahora, solo van cultivar cannabis en 0,7 hectáreas de las 3,5 previstas para cuando llegue la licencia comercial. Las instalaciones ocupan 15 hectáreas.
Así las cosas, poco duraron las expectativas generadas por la llegada de 'las rosas', como popularmente se conoció desde el inicio a este proyecto, o «el Ferrari de los invernaderos», como la definieron sus primeros dirigentes. Cabe recordar que un millar de sorianos se postularon como candidatos a trabajar en el invernadero de rosas 'Red Naomi' de Garray, que arrancó con una plantilla de 125 operarios, ya como Aleia Roses en septiembre de 2016. En aquel momento, incluso, se habló de la instalación de tres empresas auxiliares (transporte, fertilizantes y empacado) en el Parque Empresarial del Medio Ambiente (PEMA) de las que jamás se supo.
Los conflictos laborales y los problemas de viabilidad de la empresa no tardaron en llegar hasta que, finalmente, en 2020 la empresa Ondara tomó las riendas de Aleia Roses con la intención de seguir cultivando flores, si bien poco después trascendió que se dedicarían a la producción de cannabis para uso terapéutico.
El relato 'Aleia-Ondara' es el más reciente de los de la provincia de Soria que se queda por el camino y, lo peor, que deja sin empleo a decenas de trabajadores. Pero la historia industrial soriana de las últimas dos décadas no ha estado exenta de titulares sobre grandes proyectos empresariales fallidos.
Lejos de parecerse a las calles gaditanas de días pasados, miles de personas protagonizaron varias protestas en 2001 por el cierre de Delphi Packard (cableado de automóviles) tras diez años de actividad en Ólvega. Un buen ejemplo de lo que se conoce como deslocalización (Delphi trasladó la fábrica a Marruecos) que dejó sin sustento a medio millar de personas. Tres años después, Levi Strauss, también en la villa olvegueña, se llevaba su producción a la India y dejaba en la calle a 178 trabajadores, y también bajó la persiana Cárnicas Ejea, con 45 empleados. Sin embargo, la capacidad de recuperación de Ólvega, gracias al industrial Emiliano Revilla, no tiene rival y ya en 2008 se habían creado 800 nuevos empleos. Y en este resurgir moncaíno hay algún ejemplo que se asemeja a lo ocurrido en 'Aleia-Ondara'. Rojatex compró en 2007 la nave que dejó Levi Strauss e invirtió seis millones de euros, además de crear medio centenar de empleos. Siete años después, el Juzgado de Primara Instancia, Instrucción y Mercantil número 2 de Soria acordó la extinción de la persona jurídica de Rojatex SL, que llegó a ser una de las firmas destacadas de la Pasarela de la Moda de Castilla y León.
También en 2012, la eólica danesa Vestas Wind Systems advirtió del cierre de su planta en Ólvega, con una plantilla compuesta por un centenar de trabajadores. Aterrizó en el polígono olvegueño en 2002 y en apenas seis años multiplicó su inversión hasta los once millones. En esta ocasión, la deslocalización de la producción recaló en China. Una vez más, se materializó el 'milagro de Ólvega' y en 2017 la quesería Saiona (empresa vinculada a Valle de Odieta, que proyecta la vaquería de Noviercas) empezó a funcionar en el mismo emplazamiento.
bendición presidencial. Puertas Norma (San Leonardo de Yagüe) anunció en 2011 el despido de seis de cada diez trabajadores, más de 300. Los peores augurios en torno al motor industrial de la comarca de Pinares de Soria y Burgos se confirmaban, cinco años después de que los presidentes del Gobierno y de la Junta de Castilla y León, José Luis Rodríguez Zapatero y Juan Vicente Herrera, inauguraran las nuevas instalaciones de la factoría, «las más modernas de Europa», en manos del grupo norteamericano Jeld Wen. En aquella visita presidencial de octubre de 2006, Norma lideraba el sector de la fabricación de puertas.
Tras meses de manifestaciones, negociaciones y litigios, en 2013 la Diputación de Soria, acompañada por el grupo Tover, Caja Rural de Soria, Soria Futuro y el Ayuntamiento de San Leonardo de Yagüe, rescató a Norma Doors Technologies, aunque entonces con una plantilla de apenas un centenar de personas en el primer año de funcionamiento, nada que ver con aquella fábrica, de la que vivían familias enteras, que llegó a tener más de 600 operarios.
Los avatares de la factoría por sobrevivir dieron incluso para un libro, publicado en 2016 por Comisiones Obreras (CC. OO.), 'La deslocalización fallida de Norma'. En 2018 Norma Doors y Uniarte se fusionaron creando Unidoors Holding, uno de los mayores fabricantes de puertas de Europa.
visita real. Tres años después del desembarco presidencial en Puertas Norma, nada menos que el rey Carlos Gustavo de Suecia llegaba a Ólvega para inaugurar Climatewell, «la única del mundo» que en 2009 desarrollaba un sistema de climatización de gran eficiencia energética que, alimentado por energía solar térmica, tenía la capacidad especial de almacenar energía y suministrar tanto frío como calor, de día y de noche, sin necesidad de recurrir a fuentes externas. Empleó a 40 trabajadores.
En 2012 entró en concurso de acreedores. Esta nave tampoco está vacía, ya que desde febrero de este año funciona Tortillas a tu Gusto en el polígono industrial Emiliano Revilla. Arrancó con 25 empleados.
el declive del mueble. Almazán fue una referencia en la fabricación de muebles de calidad, igual que otros municipios del entorno como Berlanga de Duero y los de la comarca de Pinares. En este caso no se trata de deslocalizaciones ni de multinacionales a la caza de ayudas públicas, si no porque la crisis de la construcción se llevó por delante a aquellos sectores dependientes de la 'burbuja inmobiliaria'. Se ha mencionado a Puertas Norma, que desplegó su inversión casi en vísperas de la crisis de 2008, pero ese año tuvo que echar el cierre Muebles Almazán, tras cuatro décadas, todo un símbolo en la villa adnamantina, y también cesó su actividad Valentí, firma catalana de muebles y decoración de alta gama que tiene presencia en ciudades como Roma, París, Londres, Nueva York o Tokio.
En una década se perdieron un millar de empleos en el sector de la madera y el mueble. Para salvar esta sangría laboral, en 2010 surgió el proyecto Tractomueble, empresa impulsada desde el Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor), que promovió la marca comercial 'De madera de Soria'. Finalmente, parece que la iniciativa no cuajó.
apuestas institucionales. Ni Ciudad del Medio Ambiente (CMA) en Garray (más de 90 millones de euros de las arcas autonómicas), ni Cylog en Almenar ni Navalcaballo. En el polígono de esta última localidad se invirtieron nueve millones, con el compromiso también de reactivar el enclave logístico de Almenar, y las instalaciones ahí continúan sin uso. El último intento de la Junta de Castilla y León fue en diciembre de 2019, cuando la Consejería de Economía y Hacienda sacó a concurso la explotación por 1,8 millones. Sin éxito.
Sin duda, el proyecto más controvertido ha sido la CMA. En 2008, la entonces consejera de Medio Ambiente y vicepresidenta de la Junta de Castilla y León, la agredeña María Jesús Ruiz, avanzó que una decena de grandes empresas se ubicarían en Garray. Telefónica, Collosa, ACS o Iberdrola. Nada menos. Sobra decir que todo aquello quedó en agua de borrajas, aunque las esperanzas están puestas en la 'reconversión' del planteamiento inicial -proyecto declarado nulo en 2013 por el Tribunal Constitucional- en Parque Empresarial del Medio Ambiente (PEMA). La central térmica de biomasa Enso Energy Environment and Sustainability (antes Gestamp) está en marcha desde 2014 y acaba de aterrizar Carburos Metálicos, con una inversión de 14 millones. «Por el momento se sigue trabajando para poner a punto las instalaciones», aclaran desde Carburos Metálicos.
al rescate. Anteriormente, se aludía al rescate de Puertas Norma por parte de la Diputación de Soria y otras entidades. Pero hay que recordar que en 2011, Sepes (Entidad Estatal del Suelo) 'salvó' al polígono de Valcorba en 2011 con la compra del 51% de los terrenos (en concreto el 43% para esta sociedad y el resto para Adif), adquisición que costó un montante de 17 millones de euros. Una década después, el pasado mayo, el director general de Sepes, Lucrecio Fernández, presentó el estado de las obras del parque empresarial de Valcorba. Sepes es propietario de 420.886 hectáreas de suelo finalista distribuido en 30 parcelas, espacio que continúa vacío. En esta área industrial solo opera desde 2016 la sociedad cooperativa Copiso que, además, se encuentra en proceso de expansión.
La recepción municipal del polígono de Valcorba se anunció en septiembre, pero aún no se ha hecho efectiva, por lo que todavía no se ha puesto en marcha el reclamado plan de atracción de empresas.
estratégicas. Dos de las ocho concesiones de ayudas que hasta el momento ha autorizado el Consejo de Ministros en el marco del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas son para firmas que operan en la provincia de Soria. Se trata del Grupo Rugui, que en Ólvega cuenta con la única acería de Castilla y León, y Airtificial, con planta en El Burgo de Osma [Carbures]. Las ayudas ascienden a 25 millones y 34 millones, respectivamente. Cabe recordar que el Gobierno aprobó este mecanismo, dotado con 10.000 millones, en julio de 2020 con el objetivo de aportar apoyo público temporal para reforzar la solvencia de las empresas no financieras afectadas por la pandemia que sean consideradas estratégicas para el tejido productivo.
Tras la autorización de la operación a beneficio de Rugui con cargo al citado Fondo de Solvencia, la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, justificó esta ayuda en que la actividad del grupo empresarial representa un 3,7% del PIB de la provincia de Soria, «una de las más afectadas por la despoblación». El 40% de la plantilla del Grupo Rugui está empleada en la acería de Ólvega, unos 150 puestos directos. Aunque la compañía ha adquirido recientemente, tal y como confirmaron a este periódico fuentes de la empresa, un terreno anexo a la factoría, no tiene intención «a corto plazo» de ampliar. Según recoge la información difundida por la Moncloa después del Consejo de Ministros del 7 de septiembre, el plan de negocio que Rugui proyecta implica que en 2023 sus productos serán neutros en carbono, pudiendo convertirse en la primera siderúrgica del mundo en conseguirlo.
La octava empresa asistida por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi), a través del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, ha sido Airtificial, con presencia en El Burgo de Osma. En marzo, el Ayuntamiento burgense anunció que licitaría el arrendamiento de las dos naves municipales en el polígono La Güera que ocupa Airtificial [Carbures], dada la «escasa actividad» de la empresa e «incumplimiento» de lo acordado en 2012, cuando se produjo la cesión a cambio de la creación de un centenar de puestos de trabajo, algo que no ha sucedido. En junio, Airtificial demandó al Consistorio por el acuerdo plenario en el que se aprobó la reversión de estas naves.
Esta mismo miércoles, Airtificial informó que el Consejo de Administración de la compañía había acordado los términos y plazos de ampliación del capital por un máximo de 21,2 millones de euros, que ya había anunciado en mayo. Además recordaba, que el Consejo de Ministros aprobó este martes una inyección de 34 millones del Fondo de Solvencia.
Airtificial, empresa auxiliar de la industria de la automoción, aeronáutica, infraestructuras y otros sectores, asegura, asimismo, que «continúa en su línea de crecimiento». Este medio contactó con la compañía para conocer en qué se traducirá esta intención en El Burgo de Osma. «No podemos entrar en detalles en estos momentos, se busca incrementar el negocio de la compañía en distintas áreas», fue la respuesta.