El porcentaje de población en riesgo de pobreza o exclusión social (tasa Arope) se situó en Castilla y León en 2019 en el 16,7 por ciento, 2,8 puntos menos que el ejercicio anterior, y volvió a descender después del repunte experimentado el pasado año y que puso fin a más de un lustro de mermas consecutivas en este indicador que se creó en 2010 a efectos de medir la pobreza relativa en Europa ampliando el concepto de la tasa de riesgo de pobreza, que solo contempla los ingresos. Esto supone que todavía más de 402.000 habitantes de la Comunidad están en riesgo de pobreza o exclusión social, la cifra más baja desde que se tienen datos. Así se detalla en la Encuesta de Condiciones de Vida de 2019 que ayer publicó el Instituto Nacional de Estadística (INE), que recoge que en España la población en riesgo de pobreza o exclusión se situó en el 25,3 por ciento, frente al 26,1 del año anterior, 0,8 puntos porcentuales menos. La reducción de la tasa se produjo en dos de sus tres componentes: así, la carencia material severa se redujo del 5,4 al 4,7% y el riesgo de pobreza del 21,5 al 20,7%. Por el contrario, la baja intensidad en el empleo subió una décima y se situó en el 10,8%.
Con estas cifras, la Comunidad es la quinta con la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social más baja de todo el país, solo superada por Navarra (11,7 por ciento), País Vasco (14,4 por ciento), Baleares (15,1 por ciento) y La Rioja (15,2 por ciento). Por el contrario, las más elevadas se dieron en Extremadura y Andalucía (37,7 por ciento en ambos), Canarias (35 por ciento) y Murcia (31,9).
Gastos imprevisto
Castilla y León, además, es al segunda comunidad con un menor porcentaje de hogares con «muchas dificultades» para llegar a final de mes, con el cuatro por ciento de los hogares, cifra que asciende al 7,4 por ciento en la media nacional, tan sólo por detrás Aragón, con el 2,2 por ciento, mientras que Canarias, Murcia y Andalucía son las que registran tasas más altas, 13,5, 13 y 11,1 por ciento, respectivamente.
El informe también refleja que una cuarta parte de los hogares de Castilla y León no tenía en 2019 capacidad para afrontar gastos imprevistos (25,2 por ciento), por debajo de la media en el conjunto de las autonomías, del 33,9 por ciento. En este caso, laComunidad también presenta la segunda tasa más baja del país, por detrás de La Rioja (17,2 por ciento) e igualada con el País Vasco, según informa Ical.
En plena época estival, el documento revela igualmente que el 28,4 de las familias de la Comunidad no puede permitirse irse de vacaciones una semana al año, por debajo de la media nacional que se sitúa en el 33,4. En este caso, Castilla y León registra el octavo dato más bajo. Además, solo el 2,2 por ciento de los hogares experimenta retrasos en los pagos relacionados con la vivienda principal (la cifra más baja de todas las autonomías), un dato que se eleva hasta el 6,9 por ciento en el conjunto del país.
Ingresos medios netos
El estudio concreta que los ingresos medios anuales netos por persona se situaron en Castilla y León en 12.003 euros (54 más que el año precedente), mientras que en España fue de 11.680 (268 más). Los ingresos anuales más elevados se dieron en País Vasco (15.300 euros); Navarra (13.937) y Cataluña (13.527). En el extremo opuesto se situaron Extremadura (8.796) y Murcia (8.956).