Hace poco más de medio año que Lucas Fernández ocupa el puesto de gestor cultural en el Ayuntamiento de Soria, con la gran responsabilidad de la puesta en marcha de los Cines Mercado. Por ahora, aunque admite que es pronto para hacer balance, está satisfecho con la respuesta del público soriano, incluso «por encima de las expectativas» iniciales marcadas. No obstante, Fernández reconoce que hay que seguir avanzando para dotar de más contenido a este espacio cultural y también considera que hay que buscar la fórmula para que el auditorio del Palacio de la Audiencia se llene en cada de las propuestas artísticas de las campañas. Porque su tarea se centra, fundamentalmente, en la programación de los cines y del centro cultural, si bien también desempeña cometidos técnicos en otros puntos del ocio y de la cultura como son los centros cívicos o el futuro centro de La Alameda. 

¿Qué balance hace de los primeros meses de los Cines Mercado?

Es un poco temprano porque llevamos tres meses, por lo que hacer un balance es un poco prematuro como tal, pero si hay que hacerlo es muy positivo. En cuanto a público está yendo razonablemente bien, vamos más o menos por los 10.000 espectadores, pero hay mucho trabajo por hacer todavía. El proyecto de los cines es muy embrionario. Me incorporé en octubre, me metí directo en obra y a empaparme de la Concejalía de Cultura para conocer mi trabajo global, no solamente lo que tenía que ver con los cines. A los 15 días de incorporarme hasta que se abrieron los cines, iba cada mañana, estaba en contacto con la empresa constructora, y con la arquitecta municipal, Beatriz Carro, trabajamos mano a mano. 

Estaba la parte de gestión y presenté un proyecto a mis jefes, les pareció bien. Lo que hice fue poner negro sobre blanco la idea que el Ayuntamiento de Soria tenía para este lugar y que, en definitiva, es un espacio cultural dedicado al cine. El grueso de la programación es el cine comercial, que está en salas, aunque sea independiente. Trabajamos casi exclusivamente con distribuidoras independientes, no con ‘majors’, con las que trabaja Camaretas. Hemos tenido varios estrenos solo en  VOSE  ( Versión Original Subtitulada en Español) y que se han estrenado solo en una decena de salas del país, porque son películas minoritarias. Luego, por ejemplo, esta semana tenemos Gracias a Dios y Dobles Vidas que han estado en unas 80 salas que, aunque son de distribuidoras independientes, son más populares.

¿Y la parte más cultural?

Pues esta semana hemos estrenado ¡Folk! Una mirada a la música tradicional, una producción más pequeñita, que sí que ha estado en salas más comerciales, con proyecciones tipo evento con la participación del director. Estas son actividades que van un poco más allá de lo que es la mera exhibición cinematográfica.

Esta es la parte que todavía tenemos que desarrollar más. En la sala multiusos se pueden hacer proyecciones, pero por tamaño y condiciones no permite una proyección al uso. Para esta sala están previstos talleres para niños, actividades alternativas, sesiones de cortometrajes infantiles que los niños se puedan sentar en el suelo y puedan entrar y salir cuando quieran.., estamos planteando hacer algo de cara septiembre y el inicio del curso como ofertar algún tipo de extraescolar vinculada con el cine, análisis de películas que estén en cartelera... A partir de septiembre habrá alguna novedad para esta sala. 

¿Cuál es el perfil del espectador de los Cines Mercado?

Hay un público cinéfilo, que es el que puede tener el Cine Club de la UNED o el Certamen de Cortos, que busca propuestas independientes, menos convencionales. Tenemos muchas señoras mayores, que tenían dificultades de acceso a los cines de Camaretas. El público infantil está creciendo cada vez más. En este caso, hemos intentado cuidarlo mucho con propuestas de cine independiente también, no son películas de Disney, pero sí promueven valores, encajan con el espacio y son muy potentes. En estas dos últimas semanas ha crecido bastante, la Semana Santa nos ha venido muy bien. El programa de Butaca para dos no funcionó al principio, tuvimos un pequeño error de comunicación y no se entendió, porque curiosamente ese fin de semana las propuestas infantiles crecieron mucho. Ese cambio en la comunicación, con la participación de Servicios Sociales, unido a la campaña Butaca para dos nos ha ayudado a atraer al público infantil hacia este tipo de títulos. Están los niños de tres a seis años, con baja capacidad de decisión, y a partir de siete u ocho años ven más la tele, en el colegio... pues quieren ver algunas películas y se dejan guiar más por la publicidad.

Y nos falta llegar al público joven. Tenemos alguna idea para acercarnos a ellos, pero nos falta mucho. Se dejan llevar por la publicidad. O son cosas muy concretas determinadas por la temática o de género, de terror, por ejemplo, que por el momento hemos trabajado poco. Hay algunas cosas en el mercado que podríamos hacer y alguna idea para poner en marcha. Los hábitos de consumo han cambiado entre los jóvenes, se ve mucho audiovisual, mucho más que antes, pero se ve de otra manera.

¿Cuál ha sido la película más taquillera hasta ahora?

Sanfelices. Coincidió la inauguración de este espacio, con esta película rodada aquí, y de un director soriano [Roberto Lázaro].

¿Cómo se complementarán los Cines Mercado con la Film Commission?

Por un lado, en la medida en la que seamos capaces de atraer rodajes a Soria y a la provincia, puede generar interés en las propias salas. Una película que se ha rodado aquí, a priori, puede atraer al público, aunque no tenga nada que ver con Soria, y a nosotros nos puede venir muy bien. Pero, por otro lado, también los cines a la Film Commission le pueden ir bien porque una cosa que se hace en los rodajes es el visionado del material del día. Los cines se pusieron a disposición de la Film Commission para que las empresas productoras tengan aquí un espacio con un sonido potente, con una buena proyección, para chequear el material. En la propia sala 3 se pueden montar pequeños estudios de postproducción in situ. Los Cines Mercado pueden ser una herramienta de trabajo más para las compañías productoras. Y a nivel de preestrenos, también. Hay una serie que se ha rodado aquí [El pueblo] que estamos intentando hacer algún tipo de preestreno. También se puede ofrecer para pases privados para presentar trabajos a críticos, distribuidoras, etcétera. Igual que se hacen muchos congresos en la ciudad, que no necesariamente tienen que ver con empresas de la ciudad, pues los Cines Mercado podrían servir a la industria para proyecciones porque están dotados de toda la técnica.

De cara al verano, teniendo en cuenta que siempre es una época con menos público, ¿barajan alguna programación diferente?

Estamos viendo posibilidades, pero no hay nada cerrado. Se ha hablado, incluso, de sacar el cine a la calle. Estamos dándole vueltas. No hay una experiencia previa, todo es ensayo-error. Dependemos mucho del tiempo, del fútbol, de nuestra propia programación de teatro, San Juan... Está un poco por ver qué hacemos en verano. Incluso en algún momento se habló de cerrar en el mes de agosto, pero también está sin concretar.

Por la experiencia de estos meses, ¿se van a mantener los horarios de las sesiones o se harán ajustes?

Las primeras dos semanas hubo cuatro pases diarios. Fue por un ciclo de directoras europeas dentro de Think Europe que no estaba previsto que coincidiera con la inauguración de los cines. Decidimos pasar a tres sesiones diarias y es lo que se ha estandarizado. Intento que las películas se mantengan como mínimo dos semanas en cartelera y si funcionan, hasta tres. Cada fin de semana presentamos un par de estrenos de adultos y se quitan los dos que están en tercera semana. Lo que mejor funciona es la sesión de las 18.00-19.00 de fin de semana. Tenemos 170 butacas y cuando el cine se llena en esa sesión del sábado y el domingo, pues tenemos 170 espectadores. Los cines grandes tienen ocho, diez, doce salas con una media de 100 butacas, pues en hora punta pueden tener 800 personas. Estamos dentro de las previsiones, nos va bien, mejor de lo que teníamos previsto. Ha habido semanas más flojas, por el buen tiempo del invierno, por ejemplo, y ahora nos está yendo mejor. Notamos también bastante el estreno de la última de Almodóvar (Dolor y gloria) y esas semanas tuvimos unos títulos más independientes.