Estas navidades han aparecido en la literatura provincial dos libros de autores sorianos que deben tener la relevancia justa a sus valores, y que por la época de su presentación han pasado desapercibidos por nuestros paisanos. Me refiero a la <Guía de la Fauna de Valonsadero> de Valentín Guisande y a este 'De oficios' de Isabel Goig Soler. Los dos podríamos considerarlos únicos en contenido etnográfico soriano.
'De oficios', de Isabel Goig es ese libro que de no haberlo redactado ella, habríamos perdido un contenido etno-historiográfico difícil de recuperar. Siendo el último de sus más de 30 libros en su particular bibliografía, siendo sencillo de presentación es excepcional en la materia revelada en su texto. 'De oficios' es y será el libro de consulta no solo para el celtíbero que quiera conocer el pasado de los “oficios” y formas de trabajar de generaciones precedentes y de nuestra genética laboral secular. Debo reconocer con un “mea culpa” que desconocía más de un 30% de los términos laborales de oficios que en él se incluyen con sus especiales caracterizaciones personales y locales de muchos de ellos que enriquecen su comprensión y las vivencias de aquellos que dedicaron su vida a tales menesteres. Al igual que el libro de Guisande, es un libro que debería estar en todas las escuelas y centros educativos, no solo de nuestra provincia sino de toda España, ya que su léxico forma parte del complejo lenguaje castellano o español y así se significa en los primeros diccionarios de principios del siglo XVII.
Disfruta el lector desde las primeras líneas cuando explica que el Hombre logró dominar el agua, el barro y el fuego y de ahí surgieron los oficios. Fue la habilidad de ese hombre –homínido diría yo- la que combinándolos derivó en los mismos. Recipientes, instrumentos para la caza, para la construcción y así un número infinito de esos oficios ancestrales que, si no fuera por Isabel, las nuevas generaciones los desconocerían.
De la trilogía del conocimiento, primero de las COSTUMBRES, después de la GASTRONOMÍA y ahora de los OFICIOS, construye una verdadera enciclopedia del saber. Es, este texto, algo que no debe morir y que debería estar en todas las estanterías docentes en el primer eslabón. Los profesores sorianos escolares, tengo la seguridad que lo expondrán dentro de la asignatura transversal de <conocimiento del medio> y de la etnografía no solo provincial, sino hispana.
¿Saben qué es el oficio de albéitar, albardero, alcallero, alimañero, alguacil de montes……? Siguiendo “de Oficios” encontraremos un sinfín de nombres como los que anteceden con historias particulares del ayer, que de alguna forma novelan cada apartado laboral.
¿Conocen ustedes que algunos apellidos derivan de oficios? Aceña, Baciero, Cabero, Rodero, Cillero, Escudero, Ovejero, Segador y un largo etcétera.
Gracias Isabel, por tu aportación a nuestra historia, del ayer en el mañana. Serán tus queridos nietos –a quien tanto tiempo dedicas- los más orgullosos de tus lectores, diciendo con la voz muy alta: “Esto lo escribió mi abuela”.