La familia de Miguel Delibes ha saldado este viernes su "deuda" con el Instituto Cervantes al depositar un manuscrito del autor vallisoletano en la Caja de las Letras, una antigua cámara acorazada que atesora legados de los premios Cervantes y otros representantes de la cultura.

Elisa Delibes de Castro, presidenta del patronato de la Fundación Miguel Delibes e hija del autor y periodista, ha depositado en la caja número 1683 de la antigua cámara acorazada de la sede central del Cervantes las cuatro hojas del manuscrito del discurso de recepción del Premio Cervantes 1993 que el novelista pronunció en la Universidad de Alcalá de Henares en abril de 1994.

Un acto que se ha celebrado el día que se cumplen once años de su fallecimiento y con el que, ha explicado su hija, los Delibes han ido a "cubrir los números rojos" que tenían con el Instituto Cervantes, con el que estaban "en deuda" por los homenajes que esta institución ha realizado a Miguel Delibes en todos estos años.

Los Delibes saldan su 'deuda' con la Caja de las Letras - Foto: Chema Moya

Y es que, según ha explicado, su padre recibió el Premio Cervantes en 1993, cuando aún no se había creado esta Caja de las Letras y cuando en 2007 el entonces director del Cervantes César Antonio Molina le explicó su existencia, el autor, ya muy mayor y enfermo, "no entendió mucho la filosofía" del proyecto y se negó a depositar su legado.

"Pensó que iba a morir dentro de poco y que qué interés tenía", ha recordado Elisa Delibes, que ha rememorado lo humilde que era su padre y que no quería que nadie esperara algo extraordinario para ese legado, además de que contaba que "lo que no había querido decir en vida tampoco lo iba a hacer después de muerto".

Posteriormente, ha recordado, la entonces directora del Instituto Cervantes Carmen Cafarell insistió a los hijos para que Delibes realizara el depósito en la Caja de las Letras, pero ha reconocido que no llegaron a animarle para que lo hiciera.

Los Delibes saldan su 'deuda' con la Caja de las Letras - Foto: Chema Moya

Elisa Delibes ha expresado la alegría de su familia y de la fundación de poder "complacer por fin" la aspiración del Instituto Cervantes con el legado depositado este viernes, que permanecerá en la Caja de las Letras diez años, hasta el 12 de marzo de 2031.

El Cervantes, ha insistido en su discurso, ha dado mucho más a la familia Delibes de lo que ellos ceden con el discurso manuscrito, ya que durante todos estos años se han celebrado homenajes en sus diferentes sedes al escritor y, especialmente en 2020, cuando se ha celebrado el centenario de su nacimiento.

La biblioteca del Instituto Cervantes de Moscú, que lleva el nombre de Miguel Delibes, está dedicada a la prolífica obra literaria del escritor, galardonado con, además del Cervantes, con el Premio Nadal (1948), el Premio de la Crítica (1953), el Príncipe de Asturias (1982) o el Nacional de las Letras Españolas (1991).

En el acto, al que han asistido otros cuatro hijos de Miguel Delibes, el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, ha destacado que es una referencia como novelista, como periodista y como persona y cómo fue capaz de intuir muchos debates que se han ido haciendo cada vez mas importantes en la sociedad española.

Por su parte, la directora general del Libro y Fomento de la Lectura del Ministerio de Cultura, María José Gálvez, ha señalado que la celebración del centenario del nacimiento de Delibes ha sido "un punto de partida, no un punto final" para seguir haciendo exposiciones, traducciones y lecturas sobre una figura imprescindible.

Un autor que, ha dicho Gálvez, recibió en vida todos los premios y distinciones como creador y ejemplificó "la dignidad de lo que es la creación y la escritura".

Hace varios meses, la familia del escritor donó a la Biblioteca Nacional (BNE) el manuscrito del discurso de ingreso en la Academia de la Lengua, titulado "El sentido del progreso desde mi obra", leído el 25 de mayo de 1975 y contestado por el filósofo y ensayista Julián Marías.