Freno al desgaste de Santo Domingo

A.P.Latorre
-

Carlos de la Casa, jefe del Servicio Territorial de Cultura, recuerda que la duración de la vida de la piedra caliza es de 750-800 años, por lo que es preciso «tratarla de una forma permanente y constante»

Freno al desgaste de Santo Domingo - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez

El Ayuntamiento de Soria ha tomado por fin la decisión de reordenar el tráfico en los alrededores de la iglesia románica de Santo Domingo (BIC desde 1931), algo que agradece el jefe del Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León en Soria, Carlos de la Casa. Recuerda que, de esta manera, se desarrolla el convenio que se inició en la legislatura pasada con Luis Rey como responsable de Urbanismo y que en 2018, cuando se realizó una actuación de gran relevancia en Santo Domingo ya se trató la problemática de la salida de vehículos de la plaza Condes de Lérida hacia la antigua carretera nacional, «porque al haber un semáforo y al arrancar expulsaban un mayor dióxido de carbono». «Todo esto, lógicamente, perjudica a la fachada» y «hay que tener en cuenta que la piedra caliza y arenisca tiene una duración de vida de 750-800 años».  «Cuando llegan a esa edad, como la personas, hay que tratarlas de una forma permanente y constante», añade el jefe de servicio. Para evitar esto, se habló con el Ayuntamiento, que mostró su disposición a regular el tráfico cuando se terminara de modificar la zona de la plaza de Abastos y del Aula Magna. Ahora los vehículos podrán bajar por la plaza Condes de Lérida, pero la salida se hará por el Aula Magna Tirso de Molina, con lo que «se disminuye de una forma tremendamente importante la expulsión de gases y el perjuicio a la fachada de esa joya del Románico que es Santo Domingo».

La idea del Ayuntamiento, según avanzó el alcalde, Carlos Martínez, es limitar al máximo el tráfico en la zona de Santo Domingo, eliminando el semáforo que se encuentra junto a la fachada y estableciendo una única dirección en la vía para hacer un área pacificada que conecte con la calle Doctrina. 

A la vez que se preserva el patrimonio, se mejora el entorno urbano en la zona con una actuación que incluye una rotonda en la carretera de Logroño y la mejora del pavimento y el alumbrado público (LEDs) en las calles Santo Tomé y Hospicio hasta la calle Calixto Pereda. El presupuesto previsto es de 432.000 euros y el plazo de ejecución de seis meses. De esta manera, se mejorará toda la trama urbana hasta Santo Domingo y conectando con el entorno del mercado y la calle Doctrina y se facilitará el tráfico con una rotonda, apunta el alcalce incidiendo en que se cumplirá una recomendación de Patrimonio para reducir el impacto de la contaminación derivada por el tráfico en la proximidad de la fachada de la iglesia. «Nos han indicado que la ubicación de un semáforo con la parada y arranque de turismos podía afectar al edificio con los gases de los coches e incidir en la piedra y con esta reordenación eliminaremos ese semáforo con la intención de convertir la vía en un único sentido y derivar todos los giros a la nueva rotonda», explicó. La intervención incide en la mejora de los entornos monumentales.

filtraciones. La Dirección General de Patrimonio ha dado el visto bueno a la demanda por parte del Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León en Soria para realizar una nueva intervención en la fachada de la iglesia de Santo Domingo que sufre las filtraciones de agua cada vez que se registran precipitaciones abundantes. Carlos de la Casa, quien insiste en que son filtraciones y no humedades, recuerda que hace dos años se realizó una intervención «muy fuerte» en toda la fachada de la que hay que seguir haciedo cada equis tiempo otras actuaciones, teniendo en cuenta la edad del edificio. 

En esta intervención «se trató por todos los medios, y hasta el día de hoy se ha conseguido, que las filtraciones de agua no pasasen a la fachada principal y atacasen a esa maravillosa portada y el rosetón». Se ha observado que cuando se colocaron los canalones y había fuertes tormentas de agua, la recogida de agua que antes se  filtraba salía por uno de los laterales al aumentar el caudal. Al expulsarlo lo hacía por la zona del contrafuerte, por lo que se ha estudiado si era algo puntual o habitual y cómo se comporta el contrafuerte. «Solo pasa cuando hay grandes tormentas», algo que no se puede prever, y «como en su día podría llegar, que no ha llegado, a una erosión e incluso a una aparición no deseable de vegetaciónpor el continuo lavado» para evitarlo se ha propuesto poner un remate superior de piedra en el contrafuerte y una vertiente de agua que la expulse a una mayor distancia. «Ya no afectará ni al contrafuerte», apunta Carlos de la Casa. 

Se va a realizar una limpieza de la vegetación bajo la teja de la cubierta superior, consolidación de sillares y escorrentía, colocación de un chapón de plomo para evitar que entre el agua y se pueda conducir, además de la recolocación del sellado del babero de plomo y losa de piedra. La obra se ha licitado en 8.000 euros y la próxima semana o la siguiente se podrá saber la empresa adjudicataria.