Medinaceli  y la zona de salud de Arcos de Jalón en general se han quedado sin pediatra. Esta circunstancia ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los vecinos de la comarca, que denuncian que en los últimos años se han quedado sin cuatro médicos. María del Mar Redondo es una de los dos médicos que quedan en el consultorio de Medinaceli. Cuando llegó a ejercer en la zona en todo el área de salud, con Arcos de Jalón como cabecera, había diez médicos. Hoy solo quedan seis que deben divirse en tres zonas: Arcos, Medinaceli y el resto de pueblos. Pero es que además, de los seis médicos solo cuatro hacen guardias. "Con dos puntos abiertos, entre Medinaceli y Arcos, si no nos ayudan es imposible cumplir las guardias. Cualquier contratiempo nos desequilibra todo. Estamos fatal", asegura. Mari Carmen Martín, una de las vecinas que han alzado la voz, subraya que contar con dos médicos también es irreal, pues "si uno de ellos hace guardia ya no está al día siguiente. Es decir, se queda uno solo para toda la zona y eso teniendo en cuenta que igual tiene que ir a un pueblo". Ahora sin pediatra, de momento, tendrán que ir con los niños a Soria, a cerca de 80 kilómetros. Los vecinos se temen que todo esto suponga el cierre del consultorio de Medinaceli y que solo quede el centro de Arcos. Y por si fuera poco, según apunta también Silvia Pérez, vecina de la villa, a todo esto se añaden las accidentes habituales en el tramo cercano de la autovía y el elevado número de residentes no empadronaos que se ha multiplicado con la pandemia, por no hablar del servicio que hay que prestar en las seis residencias de la comarca, dos de ellas en Medinaceli.