El CRE ya tiene director y se acerca a su apertura

Nuria Zaragoza
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El Día de Soria visita en exclusiva las instalaciones del un Centro de referencia Estatal totalmente equipado

El CRE ya tiene director y se acerca a su apertura - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez.

Camillas, sillas de ruedas, biombos, los electrodomésticos en las cocinas, mesas y sillas en salones y despachos, estanterías... incluso la cafetera del bar. Todo está dispuesto para la apertura del Centro de Referencia Estatal de Atención Psicosanitaria para Personas en Situación de Dependencia de Soria, dependiente del IMSERSO. Lo está además desde hace tres años... 

Porque el proyecto acumula, sobre papel, 14 años. Doce desde que comenzó su tramitación. Seis años duraron las obras de construcción. Y hace tres que está completamente terminado y que las obras fueron recibidas por la Administración General (en septiembre de 2016). 

Las cifras y las fechas dejan en evidencia la ya larga demora que ha sufrido esta infraestructura sociosanitaria. Tres presidentes del Gobierno han tenido en su mano el destino de este edificio que se prometió, y se sigue prometiendo, como un centro de referencia a nivel estatal. Cinco subdelegados han comprometido su apertura inmediata. Año tras año, la misma promesa. Y siempre relegada. Pero ahora parece que el centro soriano atisba la luz al final del túnel. 

La delegada del Gobierno, la soriana Virginia Barcones, ha asumido las negociaciones en primera persona y «al más alto nivel» -directamente con la ministra de Sanidad,  María Luisa Carcedo, y su jefa de gabinete, también soriana- para «desbloquear» el asunto. Con la colaboración del subdelegado del Gobierno, Miguel Latorre, han conseguido resolver el principal escollo que frenaba la apertura:la dotación de personal. 

desbloqueo del personal. El Gobierno anunció hace unos días la convocatoria para el puesto de director/a de este centro, a cubrir entre el personal de la Administración por comisión de servicios. Finalizado el plazo, «al menos hay una persona interesada en cubrir la plaza», anuncia Barcones. Una vez se cierre ese proceso, «se irán ofertando el resto de puestos», hasta completar la veintena de trabajadores que cubrirá la plantilla necesaria para la puesta en marcha del CRE.

Barcones no esconde la satisfacción que supone tener garantías de que el puesto de dirección se podrá cubrir de forma inmediata ya que, repara, a esa persona le corresponderá asumir las funciones de «dirección, administración y gestión del centro» pero, también, «supervisar la formación del equipo que será seleccionado», lo que resulta «clave» para poder avanzar en la apertura.

no se crearán plazas. La plantilla del CRE ya no se cubrirá a través de plazas de nueva creación. Será «personal que ya pertenece a la administración pública», admite Barcones. «Las plazas se ofertarán a través del Funciona», el portal del empleado público, «para personas en comisión de servicios, para personas que ya son empleados públicos y que piden como destino este centro de Soria», especifica. 

«La prioridad es abrirlo y hacerlo lo antes posible, y el vehículo más rápido que teníamos es contar con personas que ya están en la administración, porque si tienes que hacer un nuevo proceso selectivo eso demora mucho el proceso», añade para justificar la decisión. 

Las fechas y los escollos encontrados en el último año avalan su decisión ya que, cabe recordar, el Ministerio de Hacienda y Función Pública denegó en junio la aprobación previa de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) para el centro. Justificó su decisión en un informe desfavorable a incrementar el gasto del capítulo uno, es decir, el dedicado al personal. Sin el visto bueno de Hacienda no hay opción de crear nuevas plazas. Pero, incluso, de haber conseguido esa autorización, los tiempos se dilatarían ya que cualquier convocatoria de empleo pública exige una ardua tramitación. De ahí la decisión adoptada, insiste la máxima responsable del Gobierno en Castilla y León. 

«Desde el mismo instante en el que llegamos al Gobierno, teníamos muy claro que el centro debía ser enteramente público y nos marcamos el compromiso de ponerlo en funcionamiento cuanto antes. Pero, con el anterior Gobierno, la dotación de personal estaba bloqueada. Hemos conseguido despejar la situación, empezar a conformar la relación de puestos de trabajo y convocar la contratación de los servicios generales [el Gobierno ha iniciado los trámites para el contrato, por 741.396 euros ]. Nuestro objetivo siempre ha sido que el centro puede ponerse al servicio de la ciudadanía cuanto antes y generar empleo directo e indirecto y, por lo tanto, riqueza», sentencia la delegada del Gobierno. 

antes de verano. Barcones prefiere no dar fechas exactas porque sabe que las promesas relegadas pesan ya mucho a los sorianos, y hay unas elecciones cerca. Pero garantiza «el impulso necesario desde lo político» para sacar adelante la apertura «a la mayor brevedad posible». Habla de meses y, entre líneas, deja ver que podría ser antes de verano, si bien todo dependerá de que se puedan cubrir los puestos ofertados. 

Ello dependerá del interés de los funcionarios por trabajar en Soria pero, también, de lo «proactivos que consigamos ser en dar difusión, dar a conocer la oferta de plazas… para resolver la situación». En este sentido agradece especialmente el esfuerzo y el trabajo realizado por el subdelegado del Gobierno en Soria, quien se ha empleado a fondo en presentar el proyecto a los interesados en el puesto, explicar las opciones de futuro del centro, la importancia del mismo para la provincia... lo que ha facilitado que la oferta de director no quede desierta. No es un asunto baladí ya que, cabe apuntar,  no siempre es sencillo en Soria ocupar determinados puestos que requieren cierta especialización y currículum. Sirva el ejemplo de la plaza de director del Centro de los Alimentos de Soria, que lleva años vacante. 

Como soriana, y como política, considera que esto no se puede ni se debe relegar más. Y admite sin tapujos que algo no se ha hecho bien, al menos en el plano de la responsabilidad política:«Llama a la reflexión, porque han pasado doce años desde que se inició este edificio. Y hay algo que me llama especialmente la atención, este centro lleva tres años completamente amueblado y equipado para ser abierto. Tres años cerrado, donde además se produce una devaluación del material, del equipo. [...] No tiene sentido hacer una inversión pública de cuatro millones de euros y que no se ponga al servicio de la ciudadanía. Nuestra obligación era solucionar el problema. Y solucionar el problema era que el centro esté abierto. Vamos a intentar hacerlo a la mayor brevedad posible», insiste, asumiendo su compromiso al respecto. Lo hace durante una visita a las instalaciones acompañando a El Día de Soria y La 8 Soria.  

siete despachos, ocho salas... Barcones revisa, acompañada por Latorre, los más de 2.000 metros cuadrados que ocupa el centro, repartidos en un sótano y dos plantas. 

En la planta inferior se localizan los servicios generales. En la planta baja, la que da a la calle Enrique Pascual, se ubica la entrada. Un patio da acceso a la recepción. A ambos lados de la mesa de recepción, dos pasillos donde se localizan tres almacenes/archivos, tres baños públicos y dos despachos (uno de ellos con baño y susceptible de ser el despacho del director). La recepción da paso también a un largo pasillo lateral que comunica con las escaleras/ascensores del edificio y con el ala derecha del edificio. En esa zona está la cafetería (que estará abierta al público), la sala de podología, cuatro salas (de diferente tamaño) y cuatro baños. 

La planta superior sigue la estructura de la baja. El ala de la derecha está dedicada a despachos médicos (cinco), sala de fisioterapia, una sala de reuniones y otra sala que combina despacho con un espacio libre para actividades colectivas, y cinco baños. Al otro lado (ala izquierda) se localiza el comedor, almacén y cocina para los usuarios, y seis habitaciones (con baño compartido para dos camas). Cabe recordar que el centro  dará una atención integral a los dependientes físicos pero, también, ofrecerá apoyo a la familia, de ahí que contará con centro de día y zona residencial. 

«Hay una zona de recursos y de referencia con los despachos, otra de tratamiento con la sala de rehabilitación, de terapia ocupaciones... Luego está la zona de alojamientos temporales, la zona de servicios generales (cafetería, salón, sala de televisión, sala de estar...) y la zona ajardinada y de paseo», sintetiza la delegada sobre la distribución de espacios. No obstante, apunta, el destino de cada despacho/sala está sin concretar ya que «una vez se ponga en marcha, van a ser los propios usuarios los que vayan definiendo el centro». 

referencia nacional. Antes de dejar el edificio Barcones insiste en recordar que se trata de un «centro avanzado» que se destinará a «la promoción, desarrollo y difusión de conocimientos, experiencias innovadoras y métodos de intervención en materia de atención sociosanitaria y de apoyo a la familia», de manera que «los conocimientos que aquí se generen se podrán trasladar a otros centros del país». Pero, también, añade, se trata de un «centro de alta especialización que prestará atención y rehabilitación integral y multidisciplinar a personas en situación de dependencia crónica o reversible derivadas de discapacidad física, promoviendo su autonomía y una permanencia adecuada en su entorno habitual». 

Atención médica, social, psicológica... para «mejorar su calidad de vida, y la de sus familias», resume.