Un informe de la Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha resaltado los beneficios para la salud, tanto mental como física, de varias actividades culturales, como el teatro, la música, el canto, los museos, la pintura o la lectura. Este estudio analizó las pruebas de más de 900 publicaciones científicas a nivel mundial, lo que supone la revisión más exhaustiva sobre arte y salud hasta la fecha. Así, el informe de la OMS destaca que desde antes del nacimiento hasta el final de la vida, las artes pueden influir positivamente en la salud. «Por ejemplo, los niños pequeños cuyos padres les leen antes de ir a la cama duermen más tiempo por la noche y se concentran mejor en la escuela. Entre los adolescentes que viven en zonas urbanas, el teatro puede apoyar la toma de decisiones responsables, mejorar el bienestar y reducir la exposición a la violencia. La música también puede apoyar la cognición en personas con demencia. El canto, en particular, mejora la atención, la memoria episódica y la función ejecutiva», resumen y agregan que las actividades artísticas pueden utilizarse para complementar o mejorar los protocolos de tratamiento de ciertas enfermedades.