Licitan las obras de la depuradora por 38 millones

EDS
-

Los colectores recogerán los vertidos de Soria capital y los transportarán hasta una nueva instalación a través de un túnel emisario de 5 kilómetros de longitud

Licitan las obras de la depuradora por 38 millones

La sociedad mercantil estatal Aguas de las Cuencas de España (Acuaes) ha licitado las obras del proyecto de los emisarios de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) de Sinova (Soria), por importe de 38,4 millones de euros. El proyecto contempla la conexión de los colectores de entrada a la actual Edar de Soria, ubicada en el paraje de La Rumbla, con la nueva Edar de Sinova. Estos colectores recogerán los vertidos de Soria capital y los transportarán hasta la nueva instalación a través de un túnel de cinco kilómetros.

También se han licitado por 3,2 millones de euros los servicios de asistencia técnica a la dirección facultativa en la supervisión y control de las obras, en la coordinación de seguridad y salud y en la supervisión y control medioambiental de la Edar de Sinova, el proyecto de los emisarios y las obras de incorporación de caudales.

Al túnel emisario se conectará el colector municipal de Los Rábanos mediante un colector en pozo, de forma que las aguas residuales del municipio serán tratadas también en la nueva depuradora. Esta instalación está diseñada para tratar las aguas residuales de 135.000 habitantes equivalentes (180.000 población de hecho en horizonte futuro), con un caudal punta de tratamiento de 48.000 metros cúbicos al día.

La inversión total asciende a 60,5 millones de euros, que está previsto sean cofinanciados en un 35 por ciento mediante el Fondo Feder 2014-2020, dentro del Programa Operativo Plurirregional de España (POPE). El 65 por ciento restante será abonado por el Ayuntamiento de Soria y la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, en virtud del convenio suscrito el 4 de marzo para la ejecución y explotación de la Edar y los emisarios de Soria.

La licitación de estas obras representa un paso adelante para que Soria y Los Rábanos puedan solucionar definitivamente los problemas actuales de depuración de las aguas residuales, de forma que se cumpla con los objetivos exigidos, especialmente en lo que afecta a la eliminación de nutrientes, un proceso obligatorio al tratarse de una zona declarada como sensible.