Los más de cien empleos existentes en el polígono industrial de Cabrejas, donde apenas hay paro, explica la llegada en los últimos meses de ocho nuevos niños a la escuela. Las familias proceden de Toledo, Argentina y Marruecos. Aunque estos nuevos pobladores no han acudido con una necesaria vinculación con la escuela, lo cierto es que el pequeño colegio se ha revitalizado y de qué manera. En cifras absolutas parece poco, pero pasar de 16 alumnos en septiembre a 24 en la actualidad es una gran noticia para una localidad como Cabrejas, que en los últimos años tenía entre 11 y 13 alumnos.  En el centro conviven cinco nacionalidades. La inmigración es, como puede comprobarse, vital. Esto lo demuestran datos como que naturales de Cabrejas apenas hay cinco niños del total. El problema sigue estando en la vivienda. Hay muy poca disponible a pesar de que existen muchas casas cerradas. El Ayuntamiento pretende que cinco pisos sin ocupar de promoción pública puedan poder alquilarse con opción a compra a los nuevos pobladores. Las mujeres en general llaman también la atención sobre la escasa oferta de trabajo para ellas, pues prácticamente todos los puestos de trabajo del polígono son aserraderos en los que solo trabajan hombres.