El mapa de transporte público de viajeros por carretera que vertebra la provincia cambiará en los próximos meses. La Junta de Castilla y León ha presentado ya las bases de la nueva propuesta de ordenación y se prevén cambios sustanciales en la Comunidad, y también en Soria. 

El nuevo modelo se estructura baje siete líneas estratégicas, bajo siete bases. La principal novedad es que los servicios se explotarán bajo la modalidad de concesiones zonales. Se trata de un nuevo concepto que plantea la distribución de la Comunidad en zonas (por proximidad a centros sanitarios y escolares) y propone la «integración» de las diferentes fórmulas de prestación del servicio (regular convencional, transporte a la demanda y especial escolar). Es decir, un mismo operador cubrirá todos los servicios en la misma zona, lo que supone reducir considerablemente el número de concesiones. En Castilla y León, de 148 concesiones y 77 autorizaciones especiales se pasará a  80 concesiones.

En Soria, según la propuesta presentado por la Junta esta semana, se contemplan en el nuevo diseño de transporte público cinco concesiones zonales que operarían íntegramente en la provincia y otras cuatro que conectarían diferentes pueblos de Soria con otros próximos de las provincias colindantes (Burgos y Segovia). Es decir, nueve en total.  

Cabe apuntar que en estos momentos hay 25 concesiones de servicios regulares operativas en la provincia, por lo que supone una reducción importante. 

de línea regular a demanda. La segunda línea estratégica es que se prevé potenciar en el nuevo modelo de transporte público de viajeros por carretera «la prestación del transporte a la demanda frente al regular general convencional». 

El transporte a la demanda adquiere un papel «preponderante» y «se incrementará en un 78%, llegando a equivaler al 50% de la oferta del transporte regular (de millones de vehículos por kilómetro al año se pasa a 15,2)». En términos de demanda, «serviría a más de 1,7 millones de viajeros por año en la Comunidad». 

Según la propuesta de la Junta, «las rutas de transporte regular cuya demanda sea inferior a 4.500 viajeros al año pasarán a ser prestadas como rutas de transporte a la demanda». En el caso de Soria, de las 25 concesiones que hay activas en estos momentos, tan solo cuatro superan el límite de 4.500 viajeros, según los datos relativos a 2018 facilitados por el Servicio Territorial de Fomento. Esto supone que 21 de las actuales líneas regulares pasarían a atenderse previsiblemente como transporte a la demanda en el nuevo mapa.

integración de líneas. La tercera línea estratégica del nuevo mapa de ordenación propuesto por la Junta supone la integración de líneas, es decir, «el transporte escolar pasará a estar integrado, con carácter general, dentro de las nuevas concesiones zonales». Esto supone que «las plazas libres en las rutas escolares podrán utilizarse por el público en general, constituyendo un incremento de oferta sin coste adicional». 

La implantación de este modelo era una pretensión de la Junta desde hace ya unos años, si bien en Soria no había tenido excesivo éxito hasta el momento. De hecho, de las 89 rutas escolares que operan en provincia, las integradas apenas son 22, cuando en otras provincias ya representan el 50%. 

contratación estratégica. En cuanto a la gestión, el nuevo modelo en el que trabaja la Junta propone una «gestión del transporte regular a través de una autoridad única del transporte» y «la creación de entes supralocales de coordinación. 

Se plantea una «contratación estratégica» basada en el «diálogo social». Es decir, el nuevo mapa concesional debe surgir tras el «análisis exhaustivo de las posibilidades de contratación actuales», y teniendo en cuenta las «reglas para el establecimiento de prescripciones técnicas», «criterios cualitativos de evaluación de ofertas», «cláusulas sociales y medioambientales en la adjudicación y ejecución de contratos», y la «subrogación laboral pactada con los agentes sociales», advierten desde la Consejería de Fomento y medio Ambiente.

«Las nuevas concesiones tendrán la consideración de obligaciones de servicio público según determina la legislación comunitaria», de manera que «la administración financiará aquellos servicios que sean deficitarios», como ocurre en la actualidad. Cabe recordar que, en el caso de Soria, la Junta abona cada año 2,5 millones para garantizar la movilidad de la población del medio rural soriano. «Se garantizará la sostenibilidad económico-financiera del sistema público de transporte» y «se obtendrán mayores sinergias y economías de escala».

Por último, se propone la introducción en los pliegos de condiciones de los contratos «elementos objetivos de valoración que primen la calidad del servicio, la modernización y seguridad de la flota y el uso de las tecnologías TIC’S». Entre otros, se plantea la adaptación de vehículos a personas con movilidad reducida, elementos tecnológicos relativos al posicionamiento de vehículos en tiempo real, ticketing sin contacto o vía móvil, sistemas de ayuda a la explotación, sistemas de ayuda a la conducción que evitan accidentes, sistemas post-accidentes, etc. 

antes de julio de 2020. El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y el director general de Transportes, Ignacio Santos, fueron los encargados de presentaron esta semana estas bases del nuevo mapa de ordenación. 

El mapa definitivo de ordenación del transporte, que ya diseña la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, se aprobará por decreto antes de julio de 2020  «con el objetivo final de garantizar un acceso universal a este servicio en Castilla y León».