Graduarse en plena pandemia

Ana Pilar Latorre
-

Nada es como pensaban. Aunque los sanitarios tienen ya trabajo, otros tardarán más en incorporarse, por el retraso de oposiciones y la situación de las empresas, pero lo harán mucho más preparados

Graduarse en plena pandemia - Foto: Javier Rodenas Pipo

A los que terminaron los estudios universitarios en plena pandemia se les denomina ya Generación C (de coronavirus). El Día de Soria ha hablado con cinco de ellos, que dicen sentirse «esperanzados» y «expectantes», pero también «algo perdidos». Es el momento de abrirse camino en un país que ofrece los peores datos de desempleo juvenil de Europa, ya que la tasa ha pasado del 30,5% en 2019 al 40,8% en 2020.

Nada es como pensaban, como terminar la carrera con clases, prácticas, exámenes y TFGs online. Unos se han incorporado al trabajo a toda prisa para ayudar en la lucha contra el SARS-Cov-2, como los sanitarios; y otros han decidido si buscar trabajo o seguir formándose con un máster y preparar oposiciones, lo que garantiza «estabilidad laboral». Lo de salir de España ya no es una opción. Muchos jóvenes creen que tendrán que independizarse más tarde de lo que pensaban, pero confían en que en las administraciones y empresas haya puestos para ellos. No en vano, tienen la ventaja de haber crecido con las nuevas tecnologías, entre otras muchas. 

Andrea Cuesta estaba haciendo las prácticas de cuarto de Enfermería en la UCI del Hospital de Santa Bárbara cuando llegó la pandemia y la enviaron a casa dos semanas. Pero a los pocos días la llamaron para incorporarse de inmediato y le hicieron un contrato de tres meses como estudiante, mucho antes de lo que ella pensaba..., y que le han prolongado hasta octubre, ya como enfermera. «Fue un cambio radical estar en casa encerrada a ir al hospital, pero no dudé ni un momento, porque era lo que yo estudiaba y quería sentirme útil», relata. «A los alumnos de cuarto nos ha venido bien, de 50 encontramos trabajo unos 30 en esos momentos». Y pudieron presentar el TFG online para tener su título. Mientras sigue «trabajando y aprendiendo», Andrea estudiará un máster de Cuidados Intensivos, que es lo que le gusta. Cree que trabajo no le faltará, dada la situación sanitaria sobre la que dice que «no hay que bajar la guardia».

Irene Lablanca y  Sara Antón son graduadas en Magisterio de Educación Primaria e Infantil, respectivamente, desde junio, cuando presentaron su TFG online. Ambas estaban en marzo haciendo prácticas en colegios, que tuvieron que interrumpir, y lamentan que las oposiciones de enseñanza se hayan aplazado. Una plaza en la escuela pública supone «seguridad» y las dos jóvenes quieren dar clase en Soria, confiando en que al no haber convocatoria se ofrezcan más plazas en 2022. Pero, mientras, seguirán estudiando: Irene un máster en Zaragoza y Sara el grado de Educación Primaria.  

Irene destaca el apoyo recibido en las «prácticas a distancia» por los profesores del colegio en el que le tocó, «aunque nada parecido con un aula real», algo en lo que coincide Sara, que había pensado participar este curso en el programa Amity para dar clases en Estados Unidos, pero se ha cancelado... Sobre la posibilidad de independizarse vital y económicamente, confían en tener pronto una estabilidad laboral para hacerlo, aunque reconocen que será más tarde de lo que habían pensado antes de que llegara la Covid-19.

empresas. La joven soriana Zoraida Gamarra ha estudiado en Madrid el doble grado de Derecho y ADE, que terminó también en junio. «Estaba indecisa por la rama a seguir», ya que en la carrera había hecho prácticas en despachos de abogados y ahora quería probar en el mundo de la empresa», pero dada la situación... Así que, finalmente, se decidió por continuar su formación con el Máster de acceso a la abogacía en la especialidad de fiscalidad, que estudiará en Madrid y que, en un principio, se impartirá en de forma presencial. 

Tuvo que terminar la carrera desde casa, por la declaración del Estado de Alarma, y confiesa que su universidad «no estaba del todo preparada para lo que ocurrió, con solo una clase de seis que se impartía online y el resto solo con el envío de vídeos y temario...».Los exámenes finales fueron orales a través de videollamada. Pero al estar más tiempo en casa logró presentar y superar los dos TFG a tiempo, «cuando de otra manera, posiblemente, hubiera tenido que dejar uno para el verano. Es una de las cosas positivas de la pandemia para mí». No tiene prisa para entrar en el mercado laboral, «aunque nos dicen que cuanto antes mejor». Zoraida espera que, mediante las prácticas del máster, pueda entrar en alguna empresa. 

Sobre las oportunidades de los jóvenes, cree que «las empresas van a experimentar una transformación digital por las circunstancias actuales, que afectará a su organización a la hora de adaptar o redefinir nuevas estrategias de negocio». Hace referencia al home office, el modelo ya implantado, y a que los trabajadores tienen que desarrollar competencias relacionadas con las nuevas tecnologías. «Nosotros tenemos cierta ventaja porque hemos crecido con ello y tenemos una cultura bastante colaborativa, nos han enseñado a trabajar en equipo». No duda que las empresas apostarán por nuevos talentos, pero insiste en que los jóvenes se deben enfocar a las habilidades tecnológicas y prepararse para saber comunicar en videoconferencias y, así, poder salvar distancias.

Otro testimonio positivo es el de Rubén Pérez Izuel, que terminó los estudios de Ingeniería Agraria y Energética en junio y ya está trabajando en Soria como ingeniero de campo. Está satisfecho pero cree que ahora es muy necesario especializarse y apostar por los idiomas para dedicarse, sobre todo, a las energías renovables. Además, en el ámbito agrario, advierte que lo que más buscan las empresas es gente de la propia zona que conozca el terreno, algo que ha echado en falta en la universidad. Este joven ve grandes oportunidades en las empresas de reciente creación y no se planea salir de España a trabajar. «Puedo progresar en Soria porque hay muchas empresas agrícolas y de energías renovables muy buenas», apunta.