En su cruzada a favor del llamado voto útil, el líder del PP, Pablo Casado, dio ayer un paso más al, directamente, solicitar a los «nuevos partidos», en alusión a Vox, que no concurran en las provincias pequeñas en las elecciones generales del 28 abril, ya que, según resaltó, eso hará que se «divida el voto» de la derecha y, por lo tanto, salga beneficiados PSOE y Podemos. El brindis al sol del popular fue contestado casi de inmediato por la formación de Santiago Abascal a través de un comunicado en el que aseguraron que «mantiene sus candidaturas en todas las circunscripciones» ante los próximos comicios, ya que consideran que «tienen un compromiso con España».
En un acto en Zaragoza con afiliados del PP, Casado puso en valor que el Partido Aragonés (PAR) haya tomado la decisión «responsable» de no presentar sus listas en las generales -concurrió con el PP en las de 2015 y las de 2016- para que no haya «dispersión del voto constitucionalista». En este punto, resaltó que «ojalá otros partidos también hicieran este análisis de responsabilidad para no tener otro Gobierno franknstein o sanchestein».
Como respaldo al mensaje de su líder, cargos del PP difundieron ayer un vídeo en el que se recurre a Epi y Blas, la famosa pareja de Barrio Sésamo, para explicar cómo votar a Vox en muchas provincias en las próximas elecciones generales impide echar al okupa de Sánchez del Palacio de la Moncloa. En las imágenes, que corrieron por redes sociales y teléfonos móviles, se explica cómo se hace el reparto de escaños en España atendiendo a la Ley D’Hondt y cómo los votos a Vox se perderán si esta formación no alcanza los números mínimos para entrar en el Parlamento. Por eso, Blas avisa a Epi que «aprenda a votar con la cabeza» porque si lo hace a «lo loco», en vez de «echar al okupa, Sánchez se comprará otro colchón y seguirá riéndole los chistes a los separatistas».
«Inamovible». El llamamiento de los populares no pareció calar en Vox, que recordó que su secretario general, Javier Ortega Smith, ya contestó en su día a su homólogo del PP, Teodoro García Egea, que la decisión de estar presente en todas las mesas electorales del 28 de abril era «inamovible» y que «no se van a plegar a los intereses de ningún otro partido». Según algunas fuentes, ambos políticos hablaron por teléfono de esta cuestión hace unas tres semanas y Ortega Smith le dejó claro al dirigente popular que seguirían en la carrera hacia las urnas por «el compromiso que tenían con todos los españoles». Por eso, sorprendió mucho que Casado insistiese en esa idea, cuando en Génova saben que la decisión de Vox no tiene marcha atrás.