ha pasadosolo un año pero parece un siglo después, sobre todo, de los últimos acontecimientos vincualdos al Covid19. Con Soria ¡Ya! y Teruel Existe como como cabeza tractora las calles de la capital de España fueron testigos de un desembarco masivo de la bautizada 'España vaciada'. Jornada lluviosa que no calmó los ánimos reivindicativos de los asistentes rematada en el epicentro de la ciudad más poblada del país. Fueron día previos marcados por la unión de fuerzas y por el despliegue de voluntarios tanto de los pudieron desplazarse a Madrid como los que mandaron su aliento desde Soria.Se calcula que 20.000 sorianos se sumaron a la Revuelta que congregó a 100.000 personas según los organzizadores. La lectura del manifiesto corrió a cargo del periodista Manuel Campo Vidal que pidió que se volviera la mirada a una zona clave para el país pero olvidada, exigió un mayor despliegue de servicios públicos, en definitiva, igualdad y un trato justo.

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Al clamor popular se unió la figura de los representantes políticvos que hicieron suyo el discurso, en busca del voto interior. Todos quisieron estar presentes. pero si la manifestación supuso un antes y un después de cara a visibilizar las carencias del medio rural su efecto se vio mitigado por un amplio periodo de desgobierno y por la repetción electoral. Si bien la formación de Gobierno fruto del pacto entre PSOE y Podemos y la creación de una cartera ministerial para frenar el retroceso demográfica así como el anuncio de la creación de oficinas de despoblación en distintos enclaves había hecho albergar ilusiones y expectativas, un vendaval llamado Coronavirus se presenta como otra amenaza para la mermada España vaciada. De la manifestación en madrid se extrae otra lectura, la desconfianza en la política tradicional de los votantes que llevaron a Teruel Existe , tras su salto a la política, al Congreso y Senado. Un paso que no dio Soria ¡Ya! pero que podría llegar en la próxima cita electoral si las territorios despoblados siguen sin entrar en la agenda de la clase política.