Son jóvenes, universitarios y comprometidos. Implicados con los demás. Responsables socialmente. Con ganas de cooperar para hacer un mundo mejor. Dispuestos a restar unas horas a sus libros, a su ocio, a su tiempo libre... para dedicárselo a quien más lo necesita. Son voluntarios universitarios.
Desde 1997 funciona en el seno de la Universidad de Valladolid la Asociación de Voluntariado, UVaVOL. Se trata de un organismo que, en síntesis, trata de «hacer de puente» entre la universidad y diferentes entidades locales pro desarrollo humano y sostenible. El objetivo, facilitar que los universitarios [aunque el programa no está cerrado exclusivamente a matriculados en la UVA] puedan ser voluntarios en estas entidades. Con ello se consigue un doble objetivo. Por un lado, los jóvenes pueden completar su formación en valores, ampliar su visión social, ser ciudadanos comprometidos... aprender más allá de lo que los libros enseñan. A mayores, este voluntariado tiene reconocimiento académico, de modo que pueden obtener unos créditos ECTS por sus horas de voluntariado, a sumar a su expediente académico.
En Soria, «todos los años participan alumnos del Campus Duques de Soria en este programa», si bien «no tantos como nos gustaría», reconoce la técnico de la asociación UVaVOL, Sara López. «Cuesta mucho llegar porque no estamos físicamente. Da mucha rabia pero las circunstancias no nos permiten llegar a más», asume. Alude con ello al principal handicap con el que cuenta el programa:no hay oficina física en Soria ya que la sede de la asociación está en Valladolid, desde donde se ofrece el servicio a los cuatro campus de la UVa.
Es el principal obstáculo y «limita mucho» el contacto con estudiantes y con entidades locales con las que colaborar, reconoce, si bien se intenta suplir con las nuevas tecnologías. Así las cosas, cuando hay algún alumno interesado, se pone en contacto con la asociación a través del correo electrónico (voluntariado@uva.es) o del teléfono de contacto (983 18 43 01) y, desde allí, se hace la orientación y mediación. «Depende un poco de su perfil, porque hay gente que tiene muy claro con quién quiere colaborar y otros que no tienen preferencias. Desde aquí se facilita el listado de entidades con las que hay convenio y se orienta un poco. En función de las preferencias temáticas y, también, de los horarios, se hace una selección de las entidades. Contactamos con ellas y, a partir de ahí, se hace la mediación con el alumno para que hablen y consensúen el voluntariado. Además, desde aquí se facilita también todo el papeleo necesario para el reconocimiento de créditos», explica la técnico.
formación. Desde la asociación se facilita también a los estudiantes formación. Es a través de «COMFO, COMplementa tu FOrmación», un curso formativo que se imparte «todos los años en otoño» y que incluye «25 horas presenciales de formación donde se cuenta con ponentes afines que, generalmente, provienen de entidades con las que se colabora», explica la responsable del programa.
Ya se han celebrado nueve ediciones. La última, a principios de curso, «sobre derechos humanos». «Este año estamos valorando replicarlo en una edición semipresencial en primavera, con diez horas presenciales y 15 de trabajos a distancia», anuncia López. «Nuestra idea es, si tuviéramos recursos suficientes, replicarlo en todos los campus de la UVa, pero de momento no es posible y solo se puede hacer en Valladolid», apunta.
Esta formación, como el propio voluntariado, también cuenta con reconocimiento académico.
miniferia de asociaciones. Además, desde la asociación se trabaja para «difundir las actividades» que hacen las entidades locales, ong, fundaciones… de carácter social con las que se colabora y que, apunta López, abarcan «muchos colectivos:personas discapacitadas, enfermos, mujeres, refugiados, ambiente infantil…». «Cuando hacen alguna campaña, hacemos hincapié y las apoyamos», especifica.
En Soria, en concreto, hay acuerdo con Cruz Roja, la Fundación ONCE; la Federación Provincial de Asociaciones de Discapacidad Física y Enfermos Renales (Fadiso), Autismo Soria, la Asociación de Parkinson Soria, Aspace y Antígona.
En esta línea también hay proyectos de futuro. «Tenemos previsto hacer una miniferia de asociaciones para que se promocionen en los campus, se den a conocer, se promueva su existencia y que, por otro lado, se sepa que pueden hacer voluntariado con ellos», explica la técnico de UVaVOL. De momento, «se va a probar en Valladolid, en dos facultades» y la idea es «ir avanzando poco a poco» en el futuro.
A mayores, desde la asociación se organizan «actividades propias» como el seminario de migraciones humanas y refugio celebrado hace unos días en Valladolid.
Formación y práctica, de la mano, para potenciar este «pequeño gesto que puede suponer un mundo».